Entre banderas de distintos colores y manteniendo las distancias de seguridad y las medidas de higiene, una treintena de miembros de los sindicatos con representación en la Mesa General de Negociación de la Función Pública de Baleares – STEI Intersindical, Comisiones Obreras, UGT, Simebal CESM, CSIF y Federación de Sindicatos de Educación y Sanidad – se manifestaron ayer en el Paseo Vara de Rey de Ibiza para reclamar un aumento de sueldo.
Leyeron un comunicado unitario en el que denunciaron «una vulneración flagrante de la negociación colectiva y la mala praxis del Govern a la hora de aplicar los incrementos retributivos estatales de 2020 y 2021 y que son de obligado cumplimiento». De hecho, según Juan Nieto portavoz de CSIF Illes Pitiusas, el gobierno de Armengol «es el único de España que no ha querido negociar ni aplicar estas subidas a pesar de que fueron acordadas en 2018».
Según Mario Devis, secretario general de la federación de Enseñanza de CCOO, en 2020 y 2021 hay previstas dos subidas del sueldo, de 2% y del 0,9%, respectivamente, aunque en Baleares no se ha aplicado al personal al servicio de la administración autonómica. Algo que, según sus palabras, es incomprensible porque «es básica y, por tanto, de obligado cumplimiento por parte de las administraciones públicas» y porque «ya se ha aplicado a administraciones territoriales como la periférica del estado, consells y ayuntamientos».
En este sentido, los afectados son personal del Ibsalut, Educación, Servicios Generales, sector público instrumental de la administración autonómica y de la enseñanza concertada.
En total, según estimaron ayer los sindicatos, en las Pitiusas podría afectar a unas 4.000 personas, mientras que en Baleares la cifra puede llegar a los 38.000.
«Nada cambiará en 2021»
Los manifestantes creen que la situación seguirá igual para 2021, a pesar de que en los proyectos de los Presupuestos Generales del Estado, que se llevaron a las Cortes generales el pasado 28 de octubre, se haya aprobado un incremento en el 0,9%.
Según denunciaron ayer, tras tener el pasado 30 de octubre una sesión informativa de la Mesa de Empleados Públicos sobre el proyecto de presupuestos de la CAIB para el 2021, «el Govern se limitó a informar de unos hechos consumados, desvirtuando, una vez más el carácter del máximo órgano de negociación del personal empleado público de la Administración autonómica, tal como establece el artículo 36 del Estatuto básico del empleado público».
Algo que, según los sindicatos, «refleja posicionamientos autoritarios y unilaterales, ya que anulan de manera sistemática la capacidad negociadora de los órganos de representación legalmente establecidos» y atenta «frontalmente contra la defensa de los derechos del personal empleado público».
Asimismo, aunque aseguraron «ser conscientes de que en Baleares se sufre y se sufrirá con más intensidad las consecuencias de la crisis», también confirmaron «que no se establecen los mecanismos compensatorios necesarios por parte del Estado de reconocimiento de nuestra realidad insular, a través del Régimen Especial de las Illes Balears (REIB), y que la financiación autonómica no compensa lo que siempre hemos aportado a las arcas públicas estatales».
A pesar de ello, los convocantes se mostraron dispuestos a hablar de la situación «y si hay voluntad de entendimiento, llegar a acuerdos de calendarización, aplazamiento u otras fórmulas de reconocimiento, para evitar así el agravio comparativo con el personal empleado público del resto de las administraciones públicas y, que a la vez, este incremento no suponga, en las cuentas públicas actuales, un lastre para la administración autonómica».
De hecho, ayer Devis aseguró que desde la Administración se intentaron poner en contacto con ellos para que no se hiciera la concentración. «Nosotros lo único que queremos es que se establezcan unos términos claros en la mesa de negociación porque no nos agradan las fórmulas que están empleando, sin que se nos tenga en cuenta, y que, sobre todo, estos funcionarios que están realizando un esfuerzo enorme sean testigos de un recorte encubierto que no saben cuando recuperarán».
Por ello, y mientras esto se soluciona, los sindicatos tienen previsto hoy una concentración delante del Parlament, el lunes en los hospitales de las cuatro islas, el siguiente lunes delante de las administraciones de educación y el primer lunes de diciembre en la de Serveis Generals. «Nos quedan dos manifestaciones más y es lo que vamos a dar de plazo a Francina Armengol, pero no nos va a temblar el pulso para reclamar algo que por ley nos corresponde», concluyó Juan Nieto.
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