Las 78 muestras de miel de esta edición fueron catadas ayer por el jurado en el restaurante Ca n’Alfredo. | Marcelo Sastre

El presidente de la Asociación de Apicultores de Ibiza, Vicent Marí Torres, se mostraba ayer muy satisfecho con la participación y las «mieles exquisitas» que pudo degustar el jurado en el III Concurso de Mieles de las Islas Baleares, que organiza la asociación ibicenca.


Un concurso que sigue el Protocolo de Cata de la Marca de Garantía ÉSMEL, de octubre de 2005, aprobado por el Institut de Qualitat Alimentària (IQUA), que establece tres categorías: Primavera, Otoño y Original.


Participaron 52 apicultores de las islas que han presentado 78 muestras, frente a los 40 apicultores y 60 muestras del año pasado.


En la categoría de ‘Miel de Primavera’, ganó por tercer año consecutivo el menorquín Pau Garriga (103 puntos), la mejor ‘Miel de Original’ fue la del mallorquín Bartomeu Fullana (98,5 puntos), mientras el ibicenco Vicent Ribas presentó la que, según el jurado, fue la mejor ‘Miel de Otoño’ (113 puntos).


Marí destacó que entre las mieles originales la media fue alta, en torno a los 90 puntos. Muy peculiar resultó una miel de montaña de color casi negro y con una humedad tan baja que parecía chicle.


Fueron descalificadas cuatro muestras por exceso de humedad, que estaba limitada a un 18,5%.


El presidente de los apicultores ibicencos indicó que este año fue un año malo para la producción de miel, en cuanto a cantidad se refiere, debido a la escasez de lluvias. Motivo de más para estar satisfecho con un concurso que crece en participación cada año.