María Fajarnés, a la izquierda, junto a Francina Armengol y el presidente del Consell d’Eivissa, el sábado antes de la reunión virtual con los alcaldes de la isla.

Este pasado viernes el Govern balear anunció una línea de ayudas directas de 30 millones de euros a la restauración y otros negocios afectados en nuestra comunidad autónoma por las restricciones que se han incluido en la llamada Fase 4 para frenar el avance del coronavirus. Un día después, durante su visita a la isla, la presidenta Francina Armengol explicó detenidamente en la sede del Consell d’Eivissa, junto al presidente de la institución, Vicent Marí, la cuantía que acabaría en Ibiza.

Visto desde fuera y a priori se trata de una buena noticia para muchos ciudadanos y pymes ibicencas que están arrastrando los estragos de la crisis. Sin embargo, ayer la máxima institución insular, a través de su consellera de Economía, Hacienda y Desarrollo Empresarial, María Fajarnés, quiso rebajar la euforia alertando a Periódico de Ibiza y Formentera sobre el retraso que actualmente hay para la puesta en marcha de dichas ayudas.

El motivo es, según Fajarnés, el hecho de que la tramitación de estas ayudas se tenga que hacer desde el Consell d’Eivissa. «Por más que queramos acelerar, ahora estamos con los brazos cruzados al estar pendientes de firmar un convenio con la Consellería de Modelo Económico, Turismo y Trabajo de la parte económica de la transferencia del dinero del Govern al Consell porque nosotros no tenemos las competencias necesarias para poder gestionar las ayudas», aseguró la consellera ibicenca.

Dos cartas desde Ibiza
Una situación que ha generado «una gran preocupación» dentro del Consell d’Eivissa. Tanto que ha sido el propio presidente, Vicent Marí, el que envió este miércoles una carta firmada de puño y letra a la presidenta balear Francina Armengol para que se agilizaran lo más posible los trámites. Además, la misma María Fajarnés, hizo ayer lo propio con la consellera de Hacienda y Relaciones Exteriores, Rosario Sánchez.

En su misiva, Vicent Marí, reclama al Govern balear «la máxima agilidad y concreción a la hora de poner en marcha las ayudas» y que se les haga llegar el convenio «lo antes posible» para dotar económicamente a las ayudas. Lo mismo con la resolución que es necesaria por parte del Govern para que el Consell las pueda gestionar.

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Sin embargo, desde el Consell d’Eivissa se asegura que hasta el momento no se ha recibido ningún tipo de respuesta por parte del Govern balear. Eso sí, según confirmó María Fajarnés, en conversaciones telefónicas urgentes que ha tenido con la Secretaría General de Hacienda del Govern balear se les ha confirmado «que están trabajando intensamente en ello».

Una situación de paralización que ha provocado que a día de hoy nadie en el Consell d’Eivissa se atreva a aventurar cuándo se podrán solicitar estas ayudas y cuándo se aplicarán. «Si te digo la verdad, no sé si tardarán mucho o poco, pero lo que si tenemos claro es que si por nosotros fuera las lanzaríamos hoy mismo y por eso, una vez que el Govern nos dé su conformidad, queremos que sea una línea ágil y fácil y por ello destinaremos todos los esfuerzos necesarios que tengamos a nuestro alcance», de hecho aseguró tener las bases redactadas, concluyó María Fajarnés.

Las ayudas anunciadas
Francina Armengol anunció este sábado en Ibiza estas ayudas directas dotadas con 7,4 millones de euros, de los cuales 4,3 serán financiados a partes iguales por el Govern y el Consell y el resto, unos 2,7 millones se articularán a través de los ayuntamientos de la isla.
Las primeras están destinadas a los sectores económicos de bares, restaurantes y similares, empresas deportivas con espacios cerrados como gimnasios, academias de actividad física, danza, yoga y a empresas con dedicación principal de jacuzzis, spas o similares. Además, en las ayudas que tienen que gestionar los ayuntamientos se pide que se incluya a los que no hayan sido beneficiados en las anteriores.

Podrán acceder trabajadores por cuenta propia y pymes que ejercían su actividad hasta el 11 de enero de 2021 y que no tenga ningún acta de inspección por razones sanitarias ligadas al coronavirus. La cuantía será de 1.500 euros por centro de trabajo y mes, durante un período de al menos tres meses – enero, febrero y marzo – siempre que en estos meses estuvieran vigentes algún tipo de restricción por causas sanitarias. Además, cada empresa o trabajador autónomo solo podrá computar un máximo de dos centros de trabajo.

Pendientes también de las ayudas de los Ayuntamientos

La isla también está pendiente de las ayudas que anunció el viernes Francina Armengol en colaboración con los ayuntamientos. Al igual que en las del Consell d’Eivissa tienen que estar gestionadas por los propios consistorios y siguen paradas en el limbo infinito de la burocracia. De hecho, según explicó a este periódico María Fajarnés «nos han confirmado que ahora la prioridad son las de los consells insulares y que de momento no se plantean cómo se tiene que hacer para transferir las competencias». Por ello, la consellera aseguró que se «está dando soporte a los ayuntamientos para que puedan crear unas bases unitarias para las ayudas y que éstas sean lo más rápidas y efectivas posibles».