Las colas a las puertas del SEPE se producen de manera diaria en Ibiza y Formentera. | Toni Planells

Una media de 13.012 ciudadanos de Ibiza y Formentera, aproximadamente el 8% de la población de las Pitiusas, vivieron exclusivamente de las prestaciones contributivas del Gobierno central durante el año 2020. Esta cifra, según se desprende de los datos facilitados por el Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE), supone un incremento del 274% con respecto al año anterior.

Este espectacular aumento en el número de los perceptores de alguna prestación contributiva, como son los beneficiarios del subsidio por desempleo, de un ERTE o fijos discontinuos, coincide con el inicio de la pandemia, de las medidas restrictivas y del consiguiente desplome del empleo y de la actividad económica y turística tanto en las islas como en el ámbito nacional.

Además de las prestaciones contributivas, el SEPE tramita a su vez otro tipo de ayudas como son el subsidio, que va dirigido a aquellas personas a quienes se le ha agotado ya la prestación por desempleo y piden la ayuda familiar que ronda los 430 euros; y la Renta

Activa de Inserción (RAI) que va dirigida aquellas personas consideradas más vulnerables, que padecen alguna discapacidad o que tienen más dificultades para acceder al mercado laboral, como las víctimas de violencia de género, inmigrantes o parados de larga duración.

La cifra media de beneficiarios de alguna de las tres prestaciones en 2020 en Ibiza y Formentera fue de 16.522 personas, algo más del 10% de la población pitiusa y un 208,5% más que en el año 2019.

Evolución mensual

Y coincidiendo con las primeras medidas de confinamiento impuestas por el Gobierno central, el mes en que se disparó el número de pitiusos que percibieron una prestación contributiva, es decir, que perciben la ayuda en su totalidad durante los 30 días ya que no tienen ocupación laboral retribuida parcial en el tiempo señalado, fue el de abril. En esos días un total de 17.542 ciudadanos de Ibiza y Formentera, más del 10,5% de la población, cobraron paro, estaban en ERTE o cobraba la prestación de fijos discontinuos. El incremento en comparación con 2019 fue del 646%.

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Ese mismo mes 21.671 pitiusos cobraron alguna de las tres prestaciones del SEPE, casi el 13,5% de la población y un 389% más que el año anterior.

Un mes después, en mayo, se batió el récord de ciudadanos de las Pitiusas que cobraban alguna prestación contributiva con 21.122 personas, casi el 13% de la población y un 1.284% más que el año anterior. Sumando las otras dos prestaciones que gestiona el SEPE, la cifra ascendió a 24.022 ciudadanos, casi el 15% de la población pitiusa.

Esta tónica en el incremento del número de receptores de ayudas por parte del SEPE se mantuvo a lo largo de toda la temporada turística, básicamente por el escaso número de hoteles que decidió abrir sus puertas y el poco personal que se contrató. Así, en junio había 20.380 pitiusos que cobraban una prestación contributiva frente a los 1.467 que lo hicieron el año anterior (un 1.390% más).

Sin embargo, a partir de julio la cifra comenzó a estabilizarse a la baja, aunque aún con más que sustanciales diferencias con respecto a 2019. Así, julio cerró con 13.026 personas que cobraban el paro, un ERTE o la ayuda por fijos discontinuos, un 728% más que el año anterior.

En agosto y septiembre el número de perceptores de prestaciones contributivas volvieron a bajar a 9.916 y 7.386 personas respectivamente, para volver a ascender de manera notable en octubre, con 10.975 perceptores, noviembre con 14.872 y diciembre con 15.477. Estos incrementos coinciden con el cierre de los pocos establecimientos turísticos que pudieron hacer algo de temporada y con las medidas restrictivas que fue aplicando el Govern balear a sectores como la hostelería.

En el conjunto de Baleares, la cifra media de receptores de alguna de las prestaciones del SEPE ascendió a 109.828 personas.

Refuerzos en el SEPE
Desde el Servicio de Empleo Público Estatal, y ante el malestar generado por el servicio que está dando a la ciudadanía desde que dio comienzo la pandemia, destacaron que desde hace algo más de una semana se ha procedido a reforzar la atención al público. Concretamente, se ha ampliado la atención telefónica a la tarde, por lo que ya se puede contactar de lunes a viernes de 09.00 horas a 14.00 horas y de lunes a jueves de 15.30 a 18 horas. En cuanto a las quejas de que no hay citas presenciales en las oficinas del SEPE, desde este organismo recordaron que, en las 13 delegaciones que tienen en todo el archipiélago, están recibiendo una media de 500 personal al día presencialmente.