El almacén de alimentos de Cáritas Diocesana de Ibiza está actualmente casi vacío.

Cáritas Diocesana de Ibiza vive un momento complicado con la pandemia. Su banco de alimentos no pasa por un buen momento y, aunque la situación no llega a ser límite, en dos semanas podemos estar hablando de un problema muy serio. Por ello, a través de las redes sociales han lanzado la iniciativa ‘Cáritas te necesita’ para que cualquier persona de a pie que pueda aporte llevando comida, artículos de limpieza o simplemente donando una cantidad económica.


«Estas dos semanas son cruciales para ver si podemos seguir adelante porque se está notando el desgaste económico que esta provocando la pandemia y cada vez son menos las donaciones que recibimos», explicó ayer a Televisió d’Eivissa i Formentera el responsable del programa de alimentos de Cáritas, Pedro Miguel Ramírez.


Sin embargo, a pesar de lo complicado de la situación, aún hay optimismo ya que dentro de poco recibirán la ayuda que reciben periódicamente del Fondo Social Europeo. «Confiamos en que al final saldremos adelante porque la sociedad ibicenca siempre ha respondido y siempre hemos tenido un importante respaldo por parte de instituciones y fundaciones de la isla y, por eso, hemos decidido hacer este llamamiento antes de que sea demasiado tarde».


Aumento de personas
La ayuda que presta la organización católica a los más necesitados es fundamental ya que las cifras de personas que atienden han aumentado considerablemente. Según Ramírez, solo en la ciudad de Ibiza se ha pasado de atender antes de la llegada del coronavirus a unas 30 personas al día lunes, miércoles y viernes, a unas 50 diariamente, todos los días de la semana, lo que suma unas 250 a la semana y más de 1.200 personas al mes. «De momento, hemos conseguido aguantar como hemos podido gracias a la colaboración ciudadana pero cada vez notamos más que este número de personas aumenta sin control y, por eso, ahora más que nunca necesitamos cualquier tipo de ayuda».


En este sentido, Ramírez explicó ayer que se puede colaborar de varias maneras. La más directa es aportando todo tipo de productos de alimentación, fundamentalmente no perecederos, como los ya habituales pasta, arroz, atún o leche. Además, son muy importantes «los platos ya cocinados que no hace falta calentar porque muchos de nuestros usuarios viven en una situación tan precaria que ni siquiera tienen cocina o dinero para poder encender el horno» y los de limpieza «porque al final todo se ve de otra manera si estás guapo, aseado y tu entorno huele bien».


Por otro lado, se puede aportar una cantidad económica al mes como ya hacen unos 200 socios de la asociación católica. En este caso, según el responsable de alimentos de Cáritas Diocesana de Ibiza, «no tiene que ser fija sino simplemente lo que cada uno buenamente pueda en cada momento de su vida».