Gran respuesta en Ibiza. La iniciativa está teniendo una magnífica acogida en la isla. Daniel Paulo y sus voluntarios están muy involucrados y todos los días visitan los domicilios para recoger lo que l e ofrecen tras ponerse en contacto con él en el teléfono 673648008. Ayer tenía citas en Sant Josep, en Cala Sant Vicent y en este local de la calle Aragón de Ibiza. También se puede llevar a la sede que tiene la organiza ción en Edificio Guasch del número 4 del Passeig de la Pau de Santa Eulària. | Daniel Espinosa

La organización no gubernamental Alma de Ibiza está completando una campaña para recoger todo tipo de ropa y calzado de niños de hasta tres años para poderla repartir durante los próximos días entre las familias más desfavorecidas del país africano de Angola.

La campaña ya lleva varias semanas activa y ahora apura sus últimos días. Los interesados en ayudar tienen hasta este sábado para hacer sus entregas poniéndose en contacto con el teléfono de la organización, 673648008, puesto que ya será este mismo domingo cuando el presidente y fundador de la organización, Filipe Daniel Paulo, ponga rumbo la capital Luamba y después a distintas maternidades del país.

No es la primera vez que hacen una campaña de este tipo desde que la organización se puso en marcha «con la intención de crear centros de formación para jóvenes y adultos y ayudar en todo lo que se pueda en distintos países de África». Así, llevan años ayudando a familias en condiciones muy precarias de lugares tan diversos como Senegal, Guinea Ecuatorial, Gabón o Burkina Faso. Lo hacen dos o tres veces al año y ahora, además, están pendientes de otro nuevo proyecto de colaboración en los próximos meses con República Democrática del Congo.

Un significado muy especial

Sin embargo, en esta ocasión la iniciativa tendrá un significado aún más especial para el fundador de la organización, Filipe Daniel Paulo. Por primera vez viajarán para llevar material hasta su país natal.

Él nació como el cuarto hijo de una familia numerosa de siete hermanos en Nambuangongo, un pequeño pueblo de la provincia de Bengo, a unos cien kilómetros de Luamba, la capital de Angola, y se considera en, ciertos aspectos, un afortunado. «Tuvimos suerte porque durante la Guerra Civil pudimos huir como refugiados hasta la República Democrática del Congo cuando yo tenía tres años y donde nos acogieron hasta que tuve unos diez, recibiendo educación primaria y aprendiendo francés».

Sin embargo, luego sus hermanos mayores fueron reclutados para luchar en la guerra civil que asoló el país desde 1975 a 2002. Afortunadamente, Daniel pudo huir con otro chico, cruzando el Atlántico y llegando con 17 años a Lisboa. En Europa vivió el drama de los inmigrantes sin papeles y tras trabajar en la construcción, en 2002 dejó Portugal para poner rumbo a Madrid y finalmente en 2009 a Ibiza, donde reside actualmente y donde creó la ONG Alma Ibiza y desde donde siempre lleva «a Angola y África en el corazón»

Por todo ello, Filipe Daniel asegura que el nuevo proyecto es muy importante para su país natal. «Allí lo están pasando muy mal, porque están sumidos en una gran desigualdad económica después de muchos años de conflictos bélicos, y los que más están sufriendo todo esto son los bebés y los niños que desgraciadamente mueren cada día víctimas de enfermedades que aquí, en España y en Europa, son comunes y tienen curas relativamente sencillas».

Voluntarios de 'Alma' con una de las donaciones. Foto: Daniel Espinosa.

De hecho, el fundador de la ONG recordó a Periódico de Ibiza y Formentera como este pequeño país sigue arrastrando todo lo que dejó una terrible guerra civil que se prolongó entre 1975 y 2002 dejando al menos un millón de muertos, cuatro millones de refugiados y unos 100.000 mutilados, principalmente por las minas antipersonas. «Después de todo lo que pasó las cosas apenas han cambiado, hay mucha miseria y falta de dinero, por lo que muchas familias no tienen acceso ni pueden llegar a los hospitales ni tampoco tienen para vestir a sus niños pequeños cuando nacen y durante sus primeros años de vida, y por eso esta campaña será muy importante para ellos».

De hecho, Filipe Daniel aseguró que una de las grandes diferencias con otras iniciativas parecidas es que el reparto se hará sin ningún tipo de intermediario. «En otras organizaciones se manda la ropa y el material y allí alguien la recoge y la reparte pero en nuestro caso viajará conmigo en tres o cuatro maletas que facturaremos en Ibiza rumbo a Madrid y luego a Luamba y una vez en Angola lo llevaré personalmente a las maternidades y las zonas más desfavorecidas del país, lejos de la capital Luamba, y con ello garantizaremos al cien por cien que todo llega a quien más lo necesita».