Zona en la que el ayuntamiento ha proyectado la construcción de una rampa de varado.

Sant Antoni tiene preparado un proyecto de instalación de una rampa de varado muy cerca de Cala Gració. Concretamente en la zona donde se encuentra la depuradora. «Un punto de fácil acceso y con espacio suficiente para aparcar y poder dejar los remolques de las embarcaciones» tal como comenta Neus Mateu, concejala de Medio Ambiente de Sant Antoni.

La falta de puntos de amarre para embarcaciones de pequeña y mediana eslora es una reivindicación histórica en toda la isla de Ibiza. Lo que junto con la escasez de rampas de varada lleva a muchos usuarios a hacer uso de fondeos que en muchas ocasiones son ilegales. Así lo entiende la concejala de Medio Ambiente, que considera que las seis rampas repartidas por toda la isla son insuficientes para cubrir toda la demanda que existe en este momento. Así lo consideran también los usuarios de los fondeos irregulares que ayer mismo se terminaron de retirar en el litoral de Sant Antoni.

Seis rampas
Estas seis únicas rampas de varada se reparten entre el municipio de Eivissa, dónde se encuentra la rampa de sa Punta de Talamanca; el de Santa Eulària, con un acceso en el puerto de la localidad y otro más en Pou des Lleó; en Sant Joan, donde hay una única rampa en Portinatx; en Sant Antoni la ubicada en Caló des Moro; y en el municipio de Sant Josep, que pese a ser el municipio con más kilómetros de litoral, solo existe uno habilitado en Punta Xinxó, en la zona de Cala de Bou. Por parte del ayuntamiento de este municipio reconocen que llevan tiempo trabajando en distintas actuaciones, pendientes del visto bueno de Costas, que concretarán en cuanto esté constatado que se puedan acabar llevando a cabo.

Pendientes de Costas
Respecto a la rampa proyectada por el Ajuntament de Sant Antoni, está pendiente del mismo visto bueno. De manera que la creación de estas infraestructuras tan demandadas por los usuarios de las pequeñas embarcaciones de la isla queda en las manos de la Demarcación de Costas. Así lo considera Mateu, tras haber presentado ya el proyecto a finales de 2019, a los pocos meses de haber entrado en el ayuntamiento, ante Almudena Domínguez, directora general de la demarcación de Costas de Baleares. Proyecto que se ha vuelto a presentar como concesión administrativa recientemente y que está pendiente de la aprobación de Costas.

La concejala considera también que buena parte de la bahía no está explotada, y se acaba convirtiendo en un espacio que aprovechan los chárters ilegales que operan durante el verano, o personas que fondean de manera irregular para vivir en el barco durante todo el año. De esta manera Mateu es partidaria de que la isla entera pueda contar con una buena red de rampas y boyas ecológicas para dar servicio a toda la demanda que hay al respecto. Pone también sobre la mesa la opción de convertir esta zona de la bahía, ahora despejada de fondeos irregulares, en un campo de boyas ecológicas, regularizadas y controladas. Opción que ya ha trasladado a la Demarcación de Costas, responsable de tomar este tipo de decisiones.