Agentes de la Policía Local de Santa Eulària abortaron este pasado miércoles por la tarde una fiesta con unas 15 personas que se celebraba en una casa de la urbanización Can Furnet.

Según explicó ayer el Ayuntamiento de Santa Eulària, las patrullas comprobaron que había una celebración con música a alto volumen y que los asistentes no respetaban la normativa anti Covid.

El servicio se inició sobre las 20.00 horas, cuando desde la urbanización llegó el aviso de que se estaba produciendo una fiesta en una vivienda en la que los asistentes molestaban al vecindario por el alto volumen de la música.

En concreto, en la casa había 16 personas reunidas, siendo dos de ellas personal de un servicio que estaba ofreciendo comida a los presentes. Excepto los trabajadores, el resto de asistentes no portaban la mascarilla ni aplicaban ninguna otra medida para prevenir el contagio del coronavirus, por lo que se identificó a 14 personas y se les propuso para sanción por este motivo. Además, había un equipo profesional de música que emitía a alto volumen, por lo que también se inició un acta de infracción contra el organizador por molestias de ruido.

Tras levantar estas actas e informar a los presentes de la normativa, los asistentes empezaron a marcharse bajo la vigilancia de los agentes para evitar que se retomara la actividad instantes después.

Por otro lado, en la medianoche de este pasado jueves los agentes de Santa Eulària levantaron un acta por un presunto delito contra la seguridad del tráfico contra una mujer que conducía su vehículo de forma errática, realizando giros de 360 grados, derrapes, arrancadas y frenadas bruscas.

Los agentes consiguieron interceptar el turismo en la calle Sant Josep y, al entrevistarse con la conductora, observaron síntomas evidentes de encontrarse bajo los efectos del alcohol, arrojando en la prueba del etilómetro de muestreo de la patrulla un resultado de 1,01 mg/l de aire expirado.