Pasajeros en el aeropuerto de es Codolar. | Irene Arango

La oferta de vuelos entre el aeropuerto de Ibiza y la Península se ha visto incrementada notablemente tras la finalización del estado de alarma. Actualmente, se puede viajar hacia cualquier destino nacional sin ningún tipo de restricción, lo que ha empujado a las aerolíneas que operan en Es Codolar a incrementar sus vuelos nacionales. Ibiza estará conectada este verano con 18 destinos peninsulares, a niveles superiores a los registrados en 2019 antes de la pandemia.

No obstante, este sustancial aumento de la oferta de vuelos para volar a la Península también se ha visto acompañado de una reducción de los precios de los billetes. Y en el caso de las aerolíneas de bajo coste, como Vueling o Ryanair, se han lanzado ofertas para volar por menos de diez euros a ciudades como Barcelona, Madrid o Valencia.

Estas tarifas promocionales no cubren ni siquiera las tasas aeroportuarias, de manera que las compañías aéreas están vendiendo sus asientos ‘a pérdidas’ para recuperar la clientela perdida por la pandemia y reactivar la demanda. En este caso, el descuento para residentes queda prácticamente anulado, y apenas existen unos céntimos de diferencia entre el billete de un pasajero residente en las islas y otro de no residente.

Cabe mencionar que el descuento sólo se aplica sobre la tarifa aérea y no sobre las tasas aeroportuarias, que deben pagarse íntegramente en todos los casos. En el aeropuerto de Ibiza, las tasas por pasajero de salida estipuladas por Aena varían en función de la ruta aérea, el modelo de avión, la capacidad del mismo, el día y la hora, etc. Por ello, estas tasas suelen oscilar entre los 8 y 20 euros por pasajero.

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En el caso de un vuelo Ibiza-Barcelona cuya tarifa es de 8,66 euros para pasajeros no residentes y las tasas de AENA suponen 8,55 euros, el subsidio para residentes solo es aplicable a la tarifa de 0,11 euros. Es decir, el ahorro es de apenas 8 céntimos de euro y el pasajero residente tendría que abonar el precio de 8,58 euros, compuesto por 8,55 euros de tasas aeroportuarias y 0,03 euros correspondientes a la tarifa del billete.

De esta forma podría decirse que el descuento para residentes queda sin efecto en aquellas tarifas iguales o inferiores a las tasas aeroportuarias, y sólo es beneficioso si se aplica en billetes cuyo precio sea superior a las mismas.

Por ejemplo, en el caso de un vuelo Ibiza-Madrid cuyo precio por pasajero sea de 117,77 euros, y las tasas 8,83 euros, la tarifa para no residentes sería de 108,94 euros más tasas, mientras que para los residentes en Baleares supondría pagar apenas 27,23 euros (-75% de descuento) en concepto de tarifa, más tasas.

Partiendo de esta base, no es difícil preguntarse de dónde reciben beneficios estas aerolíneas. Al vender los vuelos a tarifas tan bajas, las low & cost captan gran parte de sus ingresos a partir de los servicios auxiliares (ancillary revenue) y penalizaciones como pueden ser la compra de los asientos, las maletas facturadas, el equipaje de mano y la facturación en el aeropuerto.