Si pensáramos en nuestras vidas en las fiestas de año nuevo del 2019, nadie hubiera imaginado todo lo que vendría después. La pandemia de Covid-19 afectó de lleno los planes de millones y millones de personas, así como también revolucionó las agendas políticas, económicas y empresariales de todo el planeta. Además, trajo una crisis económica que no se veía en la economía moderna desde la Segunda Guerra Mundial, atravesando tanto a las grandes potencias económicas como a los países emergentes, así como también a las firmas multinacionales y a las pequeñas y medianas empresas.
En ese sentido, uno de los sectores más golpeados ha sido la industria del turismo. Debido a la naturaleza de este virus, se dio por descontado que este sector tan pujante sería el que más afectado se vería. Es por eso que desde distintos sectores de la economía, ya sea por parte de los gobiernos nacionales y regionales, así como también desde el sector privado, se buscan estrategias para reavivar a uno de los motores principales de crecimiento de muchas regiones. Para ello, la digitalización ya ha comenzado a jugar un rol central.
Después de todo, no debemos obviar que uno de los grandes fenómenos que ha traído la pandemia es el mayor acceso a la inversión y a los nuevos mercados por parte de los pequeños y medianos ahorristas. Aprovechando todo lo que las nuevas tecnologías tienen para ofrecer, hoy en día se puede operar en criptomonedas, invertir en ETFs, comprar y vender acciones de la bolsa o introducirse dentro del mundo de las operaciones binarias. Todo, claro, desde la comodidad de nuestro lugar o desde cualquier destino que nos imaginemos y en cualquier momento a lo largo del día o la noche.
El sector turístico, por supuesto, se encuentra en la búsqueda de recuperar la confianza por parte de los turistas, al mismo tiempo que demostrarles mayores facilidades a la hora de pensar sus itinerarios y las formas de pagarlos. Por ejemplo, muchas aerolíneas planean incorporar el pago con criptomonedas, algo que es furor dentro de la industria y que ya sido incorporado por hoteles de primera línea, así como también grandes atractivos turísticos o casinos. Además, el puntapié brindado por El Salvador al convertirse en el primer país en aceptar a las criptomonedas como dinero de curso legal puede generar un importante efecto dominó.
Lo cierto es que tanto en la búsqueda por cumplir con todo tipo de protocolo sanitario, así como también con la intención de optimizar tiempos y rendimientos, las opciones hoteleras y excursiones que se adaptaron a la lógica del contacto cero van en aumento. Con pagos y check-in digitales, se puede reducir al mínimo cualquier tipo de riesgo y de espera. A fin de cuentas, el sector turístico sabe que está tratando con un público cada vez más digitalizado, por lo que debe adaptarse a esa nueva realidad y cumplir con sus demandas.
El futuro para la industria ya ha llegado.
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