Estrella Morente.

Estrella Morente (Las Gabias, Granada, 1980), será la gran estrella del Festival Brisa Flamenca 2021 que se celebra este jueves en el pueblo de Sant Antoni con la presencia además de la joven jerezana María Terremoto, considerada como una de las cantaoras con mayor futuro de España.

Este año el festival deja el interior del Cine Regio para celebrarse al aire libre en pleno puerto, a la altura de Sa Punta des Molí, a partir de las 20.00 horas. Para su actuación Morente anunció a Periódico de Ibiza y Formentera un espectáculo «a la altura de la magia que siempre ha caracterizado a la isla de Ibiza». De hecho, para su debut ante un gran público en nuestra isla, la cantaora granadina ha decidido contar con un gran equipo compuesto por grandes profesionales entre los que destaca la presencia de su hijo, Curro Conde Morente, considerado ya como uno de los percusionistas jóvenes más destacados de nuestro país. Además, le acompañarán el guitarrista Pepe Montoyita, su hijo Monti, Oliver Sierra Jiménez, los percusionistas Pepe Gabarre, Popo, y Tony Romero y a las palmas Remedios Heredia, Antonio Carbonell y Ángel Gabarre.

—Es la primera vez que sube a un escenario en un evento con público en la isla de Ibiza y lo hace tras un año muy duro marcado por el coronavirus. ¿Cómo afronta el concierto?
—Con muchísimas ganas. Yo conozco la isla desde hace mucho tiempo porque he venido en numerosas ocasiones. Incluso he hecho pequeñas actuaciones aunque ninguna ha sido tan importante como este Festival Brisa Flamenca. No sé como saldrá porque cada concierto es distinto pero si puedo asegurar que habrá verdad, entrega y corazón porque me apetece mucho actuar en un lugar mágico como Ibiza.

—Siempre ha asegurado que sus conciertos varían mucho dependiendo de si es íntimo o multitudinario o si es en un pequeño teatro o un festival aire libre, pero que tienen un hilo conductor. ¿Cuál es?
—Yo soy cantaora flamenca pero para mí lo más importante es la música, el arte, la cultura o el espectáculo. Siempre he creído que la vida es un espectáculo del que nosotros formamos parte. Además, siempre he apostado por dar mucho valor a los clásicos, a los que estuvieron antes, para mirar con otros ojos al futuro.

—¿Por qué?
—Porque me han ayudado a mirar hacia delante de otra manera más segura y eficaz. Además creo que te ayuda a no tener que ir cambiando cada poco tiempo, cada vez que publicas un nuevo disco. Te permite seguir siendo fiel a ti misma, sin cambiar constantemente de peinado, de estilo o de ropa. Aunque la vida y la experiencia te moldean lo importante es mantener el respeto hacía el arte.

—Lo cierto es que nunca le ha importado el que dirán… ¿Ha hecho siempre lo que ha creído oportuno?
—Sin duda. Aceptar influencias te hace libre y te enriquece, tanto profesional como personalmente. Y creo que la libertad es fundamental para seguir creando.

—¿Gracias a eso hace tiempo que dejó de ser la hija de Enrique Morente para ser una de las artistas más respetadas y queridas de España?
—Muchas gracias. Yo siempre he intentado seguir mi camino pero la figura y la influencia de mi padre es muy grande porque fue una persona muy importante, tanto a nivel personal como profesional. Era muy humilde, tanto de condición humana como laboral y por eso fue tan querido. Además, no tenía miedo a las fusiones, a renovarse y a volver a la casilla de salida cuando sacaba un nuevo disco. Era capaz de revolucionar el flamenco y después volver a los ancestros y a los clásicos como si nada. Él me enseñó que la creación apenas tiene límites y me hizo una enamorada de la música y del arte.

—¿Qué queda de aquella niña que cantaba flamenco y aquella adolescente que debutó profesionalmente con 16 años?
—Me gustaría creer que muchísimas cosas porque todo lo que somos cuando somos niños nos marca y se nos queda dentro. Heredamos lo que vivimos, lo que sentimos e incluso lo que comemos. Aunque cambien las caras, los pescuezos o los cuerpos lo que hayas vivido en tu infancia es fundamental en un futuro. Por eso yo creo que nunca tenemos que dejar de proyectar esa niña que llevamos dentro.

—Viniendo de una familia como la suya… ¿cree que se nace con arte o que este se puede conseguir con estudio y trabajo?
—Yo siempre crecí escuchando a mi padre diciendo que sin arte la vida no es tan bonita ni tan ilusionante. Es cierto que todo lo tienes que desarrollar y trabajar después, pero creo que sin arte y sin talento es complicado. Creo que para llegar a la meta y conseguir lo que muchos llaman éxito ha de haber una mezcla de ambas cosas.

—¿Qué es para usted el éxito?
—Es difícil decirlo porque cada uno interpreta este concepto de manera distinta. Tal vez para mí es poder ser libre para poder expresarme con mi propia personalidad. Y es que sin libertad no se puede crear.

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—¿Qué tiene el flamenco que le hace tan especial?
—Que es pura magia. Es un lenguaje universal, tal vez el más de todos. Con el flamenco te puedes entender con cualquier persona sin necesidad de hablar el mismo idioma. Eso es algo que yo he comprobado personalmente. He cantado y actuado con músicos sefardíes, paquistaníes, portugueses, rusos o chinos que no tenían nada que ver conmigo y cuando nos hemos puesto a cantar y tocar flamenco nos hemos entendido a la primera.

—En eso su padre fue un pionero en España...
—Sin duda. Mi padre aprendió y disfrutó mucho tocando con palestinos, marroquíes o de otros muchos lugares del mundo y eso lo vi desde que era niña marcándome para siempre. También era una enamorado de la música clásica y por ello incidió en que estudiáramos instrumentos cuando éramos pequeños y aprendiéramos, como él decía, a leer las hormiguillas. Creo que como siempre, tomo una gran decisión.

—Pero hay también quien les criticó al creer que el flamenco tiene que ser puro.
—Y menos mal porque todas las críticas son bienvenidas. Hay que saber aceptarlas porque siempre que se hagan con respeto te hacen mejores. Es como el bien que no puede existir sin el mal, el negro con el blanco o el ying y el yang. Es bueno que haya gente que no piense igual que tu.

—Desgraciadamente no hay mucha gente que piense como usted.
—Creo que se aprende con los años y la experiencia. Cuando eres joven todo duele más, incluso el amor, pero luego entiendes que todo el mundo tiene derecho a dar su opinión siempre que sea respetuosa. Es la base de la libertad de expresión y aunque te lleves disgustos hay que encajar las críticas y tomártelas como un aliciente para hacer las cosas mejor.

—Hace 15 años publicó su disco Mujeres con el que marcó un antes y un después en su carrera musical. Si tuviera que hacer una segunda edición, ¿a quién se lo dedicaría en los tiempos que corren?
—Sin duda a mi abuela Rosario. Para mí es un lujo tenerla cerca porque a pesar de su edad es mi mejor amiga, mi mayor confidente y mi gran apoyo para muchas cosas. Ella sabe y guarda muchas cosas de cuando yo era niña y estoy segura que no sería la mujer que soy ahora sin ella y sin mi madre Aurora. Además, perteneció a una generación de mujeres a las que les debemos mucho porque fue luchadora, independiente y alzaba la voz siempre que podía ante las injusticias en un mundo muy diferente al nuestro y al de hoy en día. Una mujer que con tesón, lucha, esfuerzo, pocas quejas y muchas sonrisas consiguió ser la matriarca de una familia maravillosa. Y siempre de forma discreta y humilde.

—¿Es cierto que era amiga íntima de Lola Flores?
—Sí, y de más gente porque todo el mundo la quiere. Pero sí, con Lola tuvo una relación muy especial que iba más allá de la simple amistad. Aún guarda y recuerda perfectamente algunos de los regalos que ella hizo para su familia.

—¿No ha pensado nunca que la historia de Doña Rosario podría dar para un libro?
—No vas desencaminado. Siempre que puedo la grabo con el móvil para que me cuente y hasta ahora ya he conseguido tener de ella unas 70 u 80 horas. Y hemos conseguido cosas increíbles que no solo la reflejan a ella sino a toda una generación de mujeres y hombres que lograron sobrevivir al hambre, a las epidemias o a los bombardeos constantes durante la Guerra Civil.

—El último disco que publicó fue Copla. Ya hace bastante tiempo. ¿Para cuando el público podrá escuchar un nuevo trabajo discográfico de Estrella Morente?
—Pues te puedo decir que estamos en ello. Estamos metidos en el estudio entre concierto y concierto con Antonio Carbonell, quien está encargando de las labores de producción. Estoy muy ilusionada porque Antonio, más allá del director de la banda con la que toco en cada uno de los conciertos en directo, es una persona que me entiende a la perfección y con la que me compagino maravillosamente.

—Y ya la última. ¿Es cierto que escribió un poemario durante el confinamiento?
—Se podría decir que sí y aunque se lanzaron pocos ejemplares con una editorial de una ong sin ánimo de lucro ha tenido mucho éxito. Pero hablar de ello me da respeto porque más que un poemario fue una forma de dar salida a mis sentimientos rindiendo además un homenaje al mundo de la literatura y de la poesía que conocí gracias a mi padre, cuando nos animaba a leer todo lo que cayera en nuestras manos o cuando puso voz a grandes artistas. Lo que tengo claro es que yo no me considero poeta, me lo tomo con mayor humildad, como una forma de mostrar mis respetos a todos los que empleáis la pluma para cambiar el mundo.

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* Festival Brisa Flamenca. Mañana a partir de las 20.00 horas en el Paseo del puerto de Sant Antoni. María Terremoto y Estrella Morente. Entradas a la venta en el portal de internet Wegow y físicas en el Espai Jove Sant Antoni de Portmany y en Restaurante Aljovic Bar.