Una de las coloridas calles del Hippy Market de Punta Arabí. | Daniel Espinosa

El ‘Hippy Market’ de Punta Arabí dijo ayer adiós a la temporada en una jornada tensa, pero de mucha actividad.

La Asociación de Vendedores del Mercadillo de Punta Arabí (Avehmpa) emitió el martes un comunicado en el que mostraba su malestar con la empresa gestora del espacio, Azuline Hoteles, debido a que el cierre del mercadillo se producía un mes antes de la fecha que se había dado a los comerciantes y artesanos a principios de verano. Además mostraban su preocupación sobre el futuro del mercadillo más antiguo de la isla.

Desde la empresa indicaron que «se está trabajando y el año que viene el mercadillo, lo más seguro, es que funcione», por lo que no era necesario alarmarse. No quisieron dar detalles de los motivos de este cierre «prematuro» solicitado desde la dirección de la empresa.

Por su parte, desde Avehmpa lamentan que 500 trabajadores autónomos se tengan que quedar sin trabajo antes de tiempo debido a una decisión repentina. Los comerciantes y artesanos recibieron el pasado viernes la comunicación por vía email del cierre de temporada.

Los trabajadores del mercado declararon no entender las razones que llevan a los organizadores a cerrar, ya que está habiendo público y no ha habido problemas de ningún tipo en el desarrollo de la actividad durante los meses en los que se ha desarrollado este año.

Desde Avehmpa reclamaron a la empresa el mismo nivel de compromiso que esta les exige a ellos para poder trabajar, que les pidió que tuvieran disponibilidad para trabajar hasta el 27 de octubre.

Los vendedores apelaron también al Ayuntamiento de Santa Eulària para que les ayude a mantener vivo el mercadillo . El Consistorio ya hizo presión antes del verano para que la empresa gestora lo pusiera en marcha esta temporada.

La asociación informó de que ha contactado con los representantes de la empresa y con miembros del Ayuntamiento con la intención de que la cadena cumpla con su compromiso. A pesar de ello el ánimo ayer entre los comerciantes era triste, como son las despedidas prematuras.