Atuneros frente a la bahía de Portmany, en una imagen de archivo. | Toni P.

El Consell de Govern acordó ayer declarar de interés autonómico el proyecto de ordenación de la costa de la bahía de Sant Antoni, desde el Port des Torrent hasta Cala Gració. Según informó ayer la Conselleria de Movilidad y Vivienda, el proyecto cuenta con la financiación del fondo para favorecer el turismo sostenible de la Agencia de Estrategia Turística de las Islas Baleares.

Esta declaración supone la reducción de los trámites administrativos para dar un empuje a la ejecución del proyecto que, según destacó el Govern, tiene una importancia «crucial» para la actividad económica de la zona.

La iniciativa, que actualmente se encuentra en fase de redacción, comprende las actuaciones necesarias para la ordenación de la zona costera de la bahía de Portmany y diseña un paseo que une toda la costa en el que los peatones y ciclistas serán los protagonistas, mejorando las infraestructuras de la zona para los residentes y turistas. Una parte fundamental del proyecto es la de mejorar también el funcionamiento de la red de aguas residuales con el fin de incrementar su eficacia. El ámbito de este proyecto comprende un tramo amplio de costa, desde Cala Gració hasta el Port des Torrent.

Esta actuación comprende el territorio de dos términos municipales, el de Sant Antoni y el de Sant Josep. Además de la financiación con fondos para favorecer el turismo sostenible, el Consell d’Eivissa financia un 25% del proyecto y el resto se divide entre los dos ayuntamientos promotores. La ayuda otorgada por AETIB es de un 50% del valor del proyecto, 10.199.663 euros. El importe total del proyecto es de 20.399.326 euros.

Los objetivos
Según la Conselleria, el proyecto busca objetivos como crear un itinerario seguro, tanto para peatones como para ciclistas, a lo largo de toda la costa que rodea la bahía, desde la playa de Cala Gració hasta la playa del Port des Torrent.

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Asimismo, pretende diseñar un trazado más óptimo, mejorar la accesibilidad para todas las personas, proteger y destacar la vegetación endémica y el paisajismo y señalizar e iluminar el carril bici proyectado.

También busca mejorar y reordenar las obsoletas infraestructuras de saneamiento en la zona sur de la bahía; minimizar el impacto visual de las casetas que contienen los pozos de bombeo de aguas residuales que provocan vertidos al mar, así como molestias por malos olores a turistas y residentes. Además se intenta rehabilitar y ampliar los muelles existentes para mejorar el tráfico entre las dos orillas de la bahía.

Por su parte, el Ayuntamiento de Sant Josep mostró ayer su «satisfacción» con esta decisión del Ejecutivo autonómico. El alcalde Ángel Luis Guerrero explicó que ello permitirá acelerar los plazos y reducir parte de los trámites para poder realizar antes un proyecto «crucial» para el municipio. Guerrero recordó que Sant Josep es el municipio que ha recibido el encargo de gestionar la tramitación del proyecto.

Inversión de 20 millones
Para el alcalde josepí, esta decisión del Govern es una muestra más del compromiso del Ejecutivo de Francina Armengol con esta inversión, «estratégica en la transformación que se quiere para todo este ámbito». Asimismo, precisó que esta actuación de casi 20 millones recibe también el apoyo «clave» del fondo para favorecer el turismo sostenible por parte de la Agencia de Estrategia Turística de Baleares.

Desde el Ayuntamiento apuntaron que la oficina técnica creada para pilotar esta actuación trabaja en el diseño del proyecto y ultima la propuesta inicial del trazado que seguirá el futuro paseo litoral previsto en la bahía.