El IPC refleja no solo los incrementos de la electricidad y los carburantes, sino de la mayoría de productos y servicios que analiza mes a mes. Se registran subidas en casi todos, lo que se traduce en un encarecimiento del coste de vida. | Teresa Ayuga

La escalada de precios no cesa y los incrementos que registra el índice de precios de consumo (IPC) mes tras mes son cada vez más elevados. En septiembre aumentó un 4,2 % en comparación con el mismo período del año anterior en Balears, lo que representa la mayor subida en los últimos 13 años. Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), desde septiembre de 2008, cuando se contabilizó una subida de la inflación del 4,3 %, no se había repetido un aumento tan elevado hasta el mes pasado.

La subida registrada en Balears está ligeramente por encima de la estatal, del 4 %, y es hasta ocho décimas superior a la del mes de agosto (3,4 %). Desde principios de año, los precios se han incrementado un 3,3 % en las Islas y un 3,1 % en el conjunto del Estado.

El fuerte encarecimiento de la electricidad y de los carburantes es el principal factor que explica la escalada de los precios. Precisamente el grupo que engloba a electricidad, gas y otros combustibles lidera, de lejos, el incremento. Se ha encarecido un 37,8 % en septiembre en comparación con el mismo mes del año anterior. Le sigue la utilización de transportes personales, con una subida del 11,7 %, atribuible al aumento de los carburantes. Ambos grupos registraron en septiembre alzas más altas que en agosto, que fueron del 30 % y del 10, 7 %, respectivamente.

Prácticamente todas las partidas aumentaron de precio en septiembre, a excepción de los equipos y servicios de telefonía y fax, que se abarataron un 7,8 % y un 2,4 %, respectivamente.

El índice de precios de consumo sigue la evolución de los precios para 221 productos o servicios. Muestra que, además de la electricidad y los carburantes, contribuyen a su incremento el alza de otros productos, aunque en menor medida. En este sentido, cabe destacar que desde que se empezaron a levantar restricciones, en la primavera pasada, la demanda aumentó.

Una de las consecuencias directas de esta escalada de precios se nota en la cesta de la compra. El mes pasado, los alimentos en general subieron un 1,9 %, mientras que las bebidas no alcohólicas lo hicieron un 5,7 %.

Dentro del grupo de alimentos que son considerados de primera necesidad es relevante el encarecimiento de un 20,5 % del aceite en un solo año. El precio de los huevos subió un 6,9 % y la fruta fresca, un 5,2 %. Se trata de productos que se encuentran en la mayoría de las cestas de la compra semanales, como el pan, cuyo coste se ha incrementado un 0,2 % en el último año, pero lo ha hecho un 2 % en un solo mes.

Otros productos que aumentaron de precio en septiembre en comparación con un año antes son la leche (0,7 %), los productos lácteos (2,1 %) y la carne de ovino (6,5 %), entre otros.