El jefe de Pediatría de Can Misses, Bartolomé Bonet, en su consulta.

El servicio de Pediatría en el hospital Can Misses de Ibiza está al límite debido a la escasa dotación de especialistas de la plantilla. No es que haya vacantes es que las plazas son del todo insuficientes para atender la demanda actual.

No en vano, se trata de la plantilla «más reducida» de todos los hospitales de Baleares, según aclaró ayer el jefe de esta área médica, el doctor Bartolomé Bonet.

El experto recordó a Periódico de Ibiza y Formentera que en estos momentos hay siete pediatras para siete plazas, una dotación que califica de insuficiente, ya que estima que serían necesario un mínimo de tres profesionales más. «Con diez nos apañaríamos», reconoció.

Bonet aclaró que la plantilla de siete profesionales «es la que está presupuestada», desmintiendo a la consellera de Salud, Patricia Gómez, quien en varias ocasiones ha asegurado que no contratan más pediatras porque no están disponibles al ser Pediatría una «especialidad deficitaria».

«Si hubiera más pediatras los contrataríamos», dijo en julio la titular de Salud en el Parlament.

«No se lo creen»
De hecho, eso es lo que espera Bonet. «Es posible que en el futuro aumenten ese presupuesto, pero a fecha de hoy, en Can Misses, la plantilla está presupuestada en siete pediatras, ni uno más ni uno menos», reiteró Bonet.

El jefe del servicio lamentó que «estamos en unas condiciones que cuando le cuentas a la gente lo que estamos haciendo, muchos no se lo creen».

En relación a las dificultades para encontrar a especialistas dispuestos a venir a trabajar a las Pitiusas, Bonet consideró que el alto coste de la vida derivado principalmente del problema de la vivienda en Ibiza no son las únicas causas que dificultan que muchos profesionales médicos elijan el Área de Salud de las Pitiusas como destino laboral.
Según destacó en declaraciones a este periódico, al ser una plantilla tan reducida, los especialistas están obligados a centrar su jornada laboral en la actividad meramente asistencial. No hay tiempo para más. Por contra, en otros destinos estos doctores tienen tiempo para ejercer como docentes o investigar, lo que hace que las plazas ofertadas sean más atractivas profesionalmente.

«La vida es más cara en Ibiza, tampoco mucho más que en Mallorca. No nos vamos a excusar sólo en los problemas de vivienda. Un profesional, lo que quiere es conseguir que su carrera mejore. Y, en este momento en Ibiza, nuestra carrera sólo puede centrarse en ver pacientes», lamentó el pediatra.

Por tanto, si un experto pretende promocionarse y optar a determinados cargos, no puede competir con su currículum con otros pediatras puesto que la actividad asistencial «luce muy poco».

Bonet defendió así que hay que hacer atractivo el destino de Ibiza en estas áreas para que profesionales interesados en formarse puedan hacerlo en las Pitiusas.

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El jefe de Pediatría consideró además que sería una gran ventaja contar en Ibiza con residentes en la especialidad, lo que permitiría dar un salto de calidad y cantidad a la hora de atraer a otros expertos: «Primero nos permitiría ir generando pediatras y para la plantilla, la docencia es un motivo más de estimulación».

Bonet lamentó que la situación en el Área de Salud de Ibiza y Formentera, con un equipo reducido en Pediatría, dificulta poder solicitar residentes, aunque la actividad asistencial sea alta.

«Es un círculo vicioso: somos pocos y no podemos hacer una serie de cosas que nos ayudarían a mejorar nuestra producción y atraer a más profesionales. Cuantos menos somos, menos podemos producir y esto va en nuestra contra», concluyó.

Motivos desconocidos
El pediatra Eladio Merino, ya retirado, aseguró a Periódico de Ibiza y Formentera desconocer las razones por las cuales el número de pediatras que hay es insuficiente.

«Es verdad que en los últimos 10 o 15 años se han creado muchísimas plazas de golpe. Es posible que el nivel tan alto que exigen para acceder a Medicina y las dificultades para pasar el MIR puedan frenar a muchos», consideró.

El doctor también lamentó que la «Sanidad pública no está muy bien pagada e Ibiza es cara». En su caso, defendió la creación de incentivos para atraer a pediatras a las Pitiusas.
«Los compañeros de Medicina General que ocupan la plaza de Pediatría lo hacen muy bien y con ilusión, pero sería deseable que quienes ocuparan estos puestos fueran especialistas», concluyó.

La falta de pediatras en Can Misses es uno de los eternos problemas del hospital. De hecho, en 2018 volvió a salir a la palestra tras la marcha de una neuropediatra.«Muchas veces no es voluntad de no contratar», insistió de nuevo el pasado mes de julio la consellera de Salud.

No hay especialistas en el mercado, la excusa del IB Salut para no incrementar la plantilla

La consellera de Salud y Consumo, Patricia Gómez, aseguró el pasado 27 de julio en el Parlament que contratarían más pediatras en el Hospital Can Misses de Ibiza si estuvieran disponibles. «Muchas veces no es voluntad de no contratar», insistió Gómez en una respuesta al Grupo Parlamentario PI Proposta per les Illes, formación que preguntó si la Conselleria de Salud tenía intención de incrementar este año el número de profesionales de pediatría en el Hospital Can Misses de Ibiza.

Gómez se escudó en que el Ib Salut ha venido incrementando las contrataciones y las plantillas, si bien justificó que dichos incrementos no se haya producido en Pediatria, una de las especialidades médicas «deficitarias» en todo el país.

Gómez insistió, en su descargo, que la pasada legislatura contrataron a una neuropediatra y que siguen mejorando las condiciones laborales de estos profesionales.

Estas respuestas no convencieron a El PI, formación que recordó a la consellera las necesidades derivadas de la pandemia entre los más pequeños.