Los ganadores recibieron su premio un año después en el Museu Etnogràfic d’Eivissa i Formentera.

El Museu Etnogràfic d’Eivissa i Formentera, en Santa Eulària, acogió este sábado la entrega de los Premis Gastronòmics d’Evisisa i Formentera. Se trata de los ganadores correspondientes a la edición de 2019 ya que la aparición del coronavirus en nuestras vidas obligó a suspender sin fecha prevista este acto.

El premio de chef del año fue para el cocinero madrileño Álvaro Sanz, del restaurante Es Tragón de Sant Antoni, único que ha conseguido una estrella Michelín en la historia de Ibiza. Con este premio se quiso poner en valor «un elemento creativo innegociable pero también su trabajo en la recuperación de la tradición, especialmente de los caldos, a través de una cocina cada vez más mediterránea, fruto del contacto con productores locales, de menú largo y homenajes a los bares».

Mientras, el premio de Restaurante Revelación fue para La Era, un restaurante que desde mayo de 2019 regentan los hermanos extremeños Samuel y Miguel Galdón en el agroturismo Can Toni Xumeu, el primero como chef y el segundo como sumiller.

Desde 1968
Por su parte, el premio a repostero o pastelero del año 2019 fue para la Pastelería Bonanza, cuya marca crearon en 1968 Magdalena Vanrell y Guillem Santandreu. En 1977 abrieron la pastelería y en 1982 la heladería hasta que en 2001 sus hijos Baltasar y Antonia se pusieron al frente, dando paso posteriormente a la mujer del primero, Na Maruja. Este premio «reconoce el trabajo artesanal y el producto de calidad» que también ha sido galardonado con la Q de calidad y la fidelidad de sus clientes.

Noticias relacionadas

El reconocimiento a Mejor Sommelier o Jefe de Sala fue para Marilina Bonet, de Es Ventall. Nacida en 1976, hija de los promotores del conocido restaurante que abrió sus puertas en 1982 en Sant Antoni, tras ejercer durante años de educadora social, en 2016 se convierte en socia de su hermano, el conocido chef José Miguel Boned, y juntos dan una vuelta al restaurante vuelve a Ibiza y forma sociedad con su hermano José Miguel encargándose de la sala y la gestión del restaurante hasta hoy.

El premio a la mejor Trayectoria Profesional fue para el alcarreño Felipe de la Peña, afincado en Ibiza desde 1969. Conocido por ser un «cocinero constante», que trabajó primero en el Hotel Siesta de Santa Eulària y luego en el Torre del Mar de Vila donde «impulsó el retorno a la cocina de las raíces ibicencas, sin dejar nunca de adaptarla a los nuevos tiempos y al nuevo modelo de clientela que la isla más internacional del Mediterráneo iba atrayendo».

El premio a la Promoción del Producto Local fue para el peix sec de Formenera, «un producto secado en parras de forma totalmente artesanal que llevan 15 años poniendo en valor David Sánchez y Belén Palerm gracias a la acción del sol y de la brisa de mar».

Por último, los premios a Mejor Bar o Gastrobar fueron para el Bar Costa en Santa Gertrudis y el de Mejor restaurante de cocina local para Sa Nansa y su chef y propietario Pere Tur.