Un momento del pleno de Sant Antoni. | Ayuntamiento de Sant Antoni

El Ayuntamiento de Sant Antoni dio luz verde ayer, un mes después del primer intento y por unanimidad, a la aprobación inicial de la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del municipio. Un acuerdo que se logró después de que el concejal de Proposta per Eivissa (PxE), Joan Torres, diera por bueno el punto relativo a la regulación de las salas de juegos y clubs de fumadores en el municipio.

Hay que recordar que Torres traicionó a sus compañeros de gobierno en el pasado pleno porque no se incluyó en el texto de la modificación del planeamiento urbanístico su propuesta de prohibir este tipo de establecimientos en el municipio, algo que tanto el propio alcalde, Marcos Serra, como el secretario de la Corporación le recordaron que era ilegal, por lo que no se podía recoger de esa forma en el documento y había que buscar una fórmula acorde con la ley.

Finalmente, Torres aceptó ayer, con su voto positivo, que tanto la salas de juegos como los fumaderos sólo puedan instalarse en edificaciones que no tengan otro tipo de actividad, es decir, que ese sea su uso exclusivo, y a una distancia mínima de 200 metros de cualquier edificio municipal. No queda prohibidos.

El concejal de PxE mostró su satisfacción por el hecho de que se fuera a aprobar por unanimidad la modificación puntual del PGOU y aseguró que «me siento útil en este plenario. Por lo único que me gustaría sentirme útil es por hacer de puente entre los grupos que están representados aquí» por lo que «si hay que dejar un tema sobre la mesa para llegar al máximo consenso, creo que hay que hacerlo».

Marcos Serra, que aún no se fiaba de poder contar con el respaldo de Torres y de la oposición, manifestó su deseo de que, en el último momento, «no cambie el sentido de su voto como hizo en el anterior pleno» y le recordó que «no puede ser útil sólo atrasando o no la modificación puntual. Usted es un regidor que también puede ser útil en su departamento», manifestó el primer edil. «Me gustaría que fuese en sus departamentos lo exigente que es con el trabajo de los demás. Lleva muchas concejalías en las que puede ser útil y hacer mucho trabajo, y no sólo atascando o intentando atascar un mes más esta modificación», subrayó Serra.

Noticias relacionadas

El primer edil se congratuló a su vez de que el grupo PSOE-Reinicia dejara de «hacer política» con esta cuestión y apoyara esta medida que ya no se podía retrasar más en el tiempo.

Bajada del IBI
El pleno de Sant Antoni aprobó a su vez por unanimidad la bajada del 5,1% del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que se aplicará a viviendas urbanas a partir de 2022. La concejala de Economía y Hacienda, Eva Prats, explicó que esta rebaja, además de ser un compromiso del equipo de gobierno, servirá para compensar la subida de recogida de basura que también se tuvo que aprobar ayer, en este caso con el voto contrario de PSOE-Reinicia y la abstención de Unidas Podemos. Este incremento de la tasa de basura, explicó Prats, es algo que tienen que hacer todos los ayuntamientos de la isla para poder hacer frente al coste de la nueva planta de triaje de Ca na Putxa.

Sant Antoni rechaza los Presupuestos Generales del Estado

El pleno de Sant Antoni aprobó ayer, con el voto contrario de la oposición, una propuesta de acuerdo presentada por el concejal de Proposta per Eivissa para rechazar los Presupuestos Generales del Estado para el año 2022.

Unas cuentas que defendieron con uñas y dientes desde PSOE-Reinicia. Y con tal fervor lo hicieron que hasta el concejal Antonio Lorenzo, en su énfasis por exaltarlas, llegó a asegurar que Pedro Sánchez iba a invertir en las Baleares «355 mil millones de euros», algo que al poco rato corrigió y dejó en 355 millones únicamente.

Una cifra que, para el Grupo Popular, tampoco es cierta porque «el PSOE hace trilerismo con los números y nos intenta engañar» mezclando todas las partidas, manifestó Marcos Serra. El más contundente, sin embargo, fue el concejal de Ciudadanos, José Ramón Martín, quien manifestó su sorpresa de que Torres trajera esta propuesta al pleno porque «ya se debatió en el Parlamento balear y todos los partidos se posicionaron. Estamos perdiendo el tiempo para lo que nos interesa».