«El catalán no será un impedimento». Poco ha tardado la realidad en desmentir a la consellera Patricia Gómez quien, en la intervención ante la prensa de la imagen, el pasado 28 de octubre, aseguró que el requisito de conocer catalán no iba a ser un impedimiento para trabajar aquí y que «se podía aplazar» ante lo que pidió «tranquilidad absoluta». | Daniel Espinosa

Tres médicos han quedado excluidos de una convocatoria para cubrir plazas en el Área de Salud pitiusa por no tener el nivel exigido de catalán.

Según explicaron ayer desde el Sindicato Médico Balear (Simebal), hace días se publicó una convocatoria para siete plazas para Urgencias del Área de Salud de Ibiza y Formentera.

Finalmente, sólo cinco facultativos se presentaron a este proceso y, de ellos, en una resolución provisional, tres han quedado excluidos por no tener el nivel exigido de catalán.

«Como sindicato creemos que es un error y demuestra que la consellera Patricia Gómez no dijo la verdad, puesto que aseguró, por activa y por pasiva, que nadie iba a quedar excluido por no saber catalán», declaró Antonio Pallicer, delegado de Simebal en Ibiza.

Desde el sindicato lamentaron, una vez más, las dificultades existentes para atraer a médicos que quieran trabajar en la isla «porque cobramos un 2% menos que en el resto de la Península, la vida está cara y además, tenemos un requisito del catalán que retrae a la gente de pedir trabajo en Ibiza». Para Pallicer, es una «gran pena» excluir de manera directa a profesionales por el simple hecho de no contar con el título habilitante de catalán. «Deberían haber preparado un decreto alternativo», dijo también Simebal en relación a la decisión del Tribunal Supremo que provocó que el catalán vuelva a ser un requisito en la sanidad pública.

Provisional
Desde el Área de Salud de las Pitiusas aseguraron ayer que la convocatoria, destinada a consolidar plazas de médicos de Urgencias, todavía no ha sido resuelta.

Además, explicaron que dicha convocatoria ha estado abierta al concurso de cualquier profesional interesado, también a los procedentes de otras comunidades autónomas. «Cuando se publiquen los datos, se verá qué ha sucedido», insistieron.

Justo hace dos semanas, una decisión del Supremo motivó que el catalán vuelva a ser un requisito para trabajar en la sanidad pública balear, aplicándose los preceptos contemplados en las leyes de Función Pública o de Normalización Lingüística.
Según cálculos del Sindicato Médico, en la isla de Ibiza hasta un 40% de la plantilla de médicos podría no tener en estos momentos la titulación requerida, un B2 de catalán en la mayoría de los casos.

Noticias relacionadas

Tras la polémica inicial, desde Salud explicaron que la ley recoge la posibilidad de exceptuar la capacitación lingüística si la falta de profesionales se produce cuando sea convocado el proceso selectivo.

«La norma no especifica las categorías deficitarias porque pueden serlo hoy y dejar de serlo en cinco años», insistieron.

Además, Simebal advirtió entonces que «prácticamente» todas las especialidades médicas en las Pitiusas son deficitarias y, por lo tanto, las declaraciones de Patricia Gómez podrían tener sentido. El primer proceso, sin embargo, ha demostrado lo contrario.

De hecho, el portavoz de Simebal en Ibiza y Formentera, Carlos Rodríguez, aseguró que en Atención Primaria «falta lo que no está escrito, unos 30 profesionales para empezar». En cuanto a especialidades hospitalarias, reconoció que en radiodiagnóstico hay diez plazas y sólo están ocupadas cuatro. En urgencias hospitalarias, «el déficit es brutal» y, según lamentó, lo mismo pasa en otras especialidades como neumología, reumatología o digestivo.

Él también consideró que la consellera de Salud, Patricia Gómez, «faltó a la verdad» cuando dijo en Ibiza que no saber catalán, no iba a ser un impedimento para trabajar en las islas. Rodríguez recordó que en las Pitiusas «la excepción es la norma y que diga ella en qué departamento no faltan médicos».

El portavoz aclaró que el Govern no puede convocar una oposición sin incluir la exigencia de un nivel B2 de catalán. «Se han equivocado desde el principio y dadas las características de nuestra comunidad, en concreto de Ibiza y Formentera, es muy complicado que vengan médicos a trabajar sabiendo que tienen un requisito, que es el catalán», lamentó el portavoz.

Desde el Govern insistieron a su vez en explicar que las excepciones sobre esta obligación lingüística se rigen por la Ley 4/2016 de Función Pública que establece tres supuestos: insuficiencia de profesionales; la contratación de investigadores o científicos de ámbito nacional o internacional y en convocatorias de selección y movilidad que afecten a categorías de personal estatutario o laboral. La posible excepción deberá ser informada favorablemente por el órgano competente en materia de planificación de recursos humanos en el Servicio de Salud, aclararon.

«Todo esto va a complicar muchísimo la gestión de la Sanidad pública y va a interferir en los procesos de selección. En Mallorca está mal, aunque hay una sanidad privada muy potente que salva de la quiebra a la pública. En Ibiza va a ser peor», concluyeron desde Simebal.