Distintas imágenes de la concentración que tuvo lugar ayer en el Hotel Club Punta Arabí. | Marcelo Sastre

Unos 60 trabajadores se concentraron el miércoles frente al hotel Club Punta Arabi de Ibiza para protestar contra la propiedad. Según su versión, «no da señales de vida y no aclara cual va a ser el futuro de la plantilla de éste y otros dos establecimientos de la isla».

El secretario general de UGT en Ibiza y Formentera, Fernando Fernández, explicó, además, que, a pesar del mal tiempo, las protestas continuarán hoy en el Hotel Coral y mañana viernes en el Hotel Atlantic «con el fin de reclamar una respuesta por parte de la propietaria, Francisca Sánchez Ordóñez».

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Según el sindicato, son 250 los trabajadores fijos discontinuos que desconocen su futuro después de que la propietaria haya recuperado la gestión de estos tres establecimientos, que explotaba la empresa Azuline. «Es muy simple, sólo tiene que decirnos dónde van a trabajar y cuántos trabajadores van a continuar», señaló Fernández mientras aseguraba que dichos empleados «están en un limbo».

De hecho, según el representante sindical los afectados pueden llegar a 350 o 400 «si se tiene en cuenta el personal de otro hotel en Menorca en la misma situación».

Hay que recordar que todas las sociedades propietarias de los hoteles están a nombre de Francisca Sánchez Ordóñez, dueña también del polémico complejo turístico ilegal, Casa Lola, en el municipio de Sant Josep.