La presidenta del Govern balear, Francina Armengol, y el presidente de la Generalitat de Catalunya, Pere Aragonès, coincidieron el miércoles en reclamar la extensión de los fondos extraordinarios COVID durante 2022 y a la espera de que se resuelva el problema de la infrafinanciación. En una rueda de prensa conjunta en Palma, los mandatarios resaltaron el problema compartido de la infrafinanciación desde la paradoja de que las economías catalana y balear generan, sin embargo, recursos suficientes para poder dar respuesta a los retos que presenta el estado del bienestar.
Aragonès defendió la necesidad de mantener los recursos extraordinarios destinados a la lucha contra la pandemia, ya sea repitiendo el modelo de fondo extraordinario COVID o con un «fondo de transición que permita tener los recursos complementarios» que ahora no tienen las comunidades autónomas. Armengol, por su parte, lamentó que por la infrafinanciación se hayan tenido que aportar recursos y ha asegurado que comparte con Cataluña el modelo de afrontar la gestión de la pandemia y la reactivación económica. «Para eso necesitamos la financiación adecuada», añadió.
«Los recursos extraordinarios COVID que ha habido en 2021 de una manera u otra deben tener continuidad a partir de 2022 y en cualquier caso hasta que no se pueda dar una solución a la infrafinanciación que sufrimos», afirmó Aragonès. El presidente catalán consideró que es necesario porque la pandemia no ha terminado y sigue «habiendo un aumento del gasto sanitario» que hay que afrontar, además de las consecuencias económicas y sociales provocadas por el coronavirus y la infrafinanciación estructural que, a su juicio, existe en la sanidad. En la misma línea, la presidenta balear añadió que si la CCAA pudiera gestionar los recursos generados desde la "corresponsabilidad fiscal" en el propio territorio tendría más herramientas para afrontar las consecuencias económicas y sociales de la pandemia.
Reforma de la financiación
El presidente catalán, sin embargo, desvinculó la demanda de prolongar los recursos extraordinarios para el coronavirus de la posible reforma del sistema de financiación autonómica, ya que sostiene que es una «necesidad inmediata» ante la pandemia. Asimismo, advirtió de que cree que el nuevo modelo de financiación autonómica será «muy difícil de acordar» por la disparidad de posiciones entre las comunidades, por lo que ve necesario que primero haya una respuesta inmediata ante las necesidades del coronavirus.
Respecto a las diferencias entre regiones, Francina Armengol afirmó que comprende que cada CCAA «defienda sus intereses y los de los ciudadanos a los que representa» y admitió que el criterio población «no responde a sus deseos». La presidenta insistió en que Baleares se enfrenta al reto de la población flotante y del incremento demográfico constante que deriva en una mayor necesidad de recursos. «Es de justicia que todos tengamos los mismos recursos disponibles», concluyó.
Aragonès explicó que esta cuestión ha sido uno de los temas de la reunión con Armengol, ya que tanto Catalunya como Baleares tienen un «modelo de financiación claramente insuficiente» y, según él, comparten la necesidad de disponer de más recursos, pese a que ha reconocido que seguramente discrepa con la presidenta balear sobre la apuesta de negociar la financiación bilateralmente con el Gobierno que tiene el Ejecutivo catalán. En este sentido, Armengol defendió la presencia de Baleares en los foros multilaterales aunque de manera paralela a una negociación a dos bandas con el Estado en cuestiones particulares como el Régimen Especial para las Islas (REB) o la problemática de la insularidad.
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