El presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, interviene delante del auditorio de Caló de s’Oli. | Daniel Espinosa

El presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, señaló ayer que, para afrontar la crisis del coronavirus, la sociedad de hoy debería «aprender del consenso» alcanzado en 1978. En su opinión, si hace 43 años se pudo alcanzar, «ahora debería ser posible».

Marí se pronunció así durante el acto institucional celebrado en el auditorio Caló de s’Oli, en Sant Josep, para conmemorar el 43º aniversario de la Constitución española, al que acudieron decenas de integrantes de las instituciones, tanto alcaldes, como miembros del Consell y representantes de la Administración General del Estado (AGE).

En su discurso, Marí agradeció su colaboración a todos los ciudadanos «y a todos los profesionales que trabajan para superar la crisis sanitaria». Al respecto, el dirigente popular alabó la buena cooperación entre el Consell y los ayuntamientos «para proporcionar una atención digna a todos los ciudadanos», al tiempo que añadió que «ahora toca gestionar la recuperación económica de la isla».

«Para ello, necesitamos recibir el reconocimiento y los fondos necesarios para poder garantizar y respetar derechos y deberes tal y como destaca nuestra Constitución», prosiguió el presidente del Consell, quien volcó sus «esperanzas en la llegada de fondos europeos y la financiación derivada del hecho insular». A su parecer, es necesario responder en el mismo nivel en que crecen las demandas y reclamaciones de la sociedad para «contribuir a la recuperación desde la justicia, la igualdad y la solidaridad».

La sanidad pública
Por su parte, el alcalde de Sant Josep, Ángel Luis Guerrero, se preguntó «qué habría sido» de la sociedad durante la pandemia sin la sanidad pública. Aunque admitió que la Constitución puede necesitar «algún retoque» debido a los grandes cambios sufridos durante los últimos años y porque, al fin y al cabo, «las leyes no son normas esculpidas en piedra», el alcalde josepí abogó por reformar sólo aquello que sea «necesario».

Para concluir, antes de felicitarse por el hecho de que la educación y la sanidad no sean «sólo para los ricos», repasó algunos artículos de la Carta Magna para recalcar la necesidad de retos pendientes, como la «descarbonización» de la energía, el reparto de la riqueza para transitar hacia una sociedad más igualitaria o la participación de los jóvenes en la vida pública. De la misma forma, recalcó el derecho a la educación –para él, «la mejor inversión»– y a la libre expresión garantizados por la Constitución, que calificó como «un arma de progreso» para conseguir esa sociedad más justa.

El director insular de la Administración General del Estado (AGE) en Ibiza y Formentera, Enrique Sánchez Navarrete, celebró haber recuperado «el formato habitual» de este acto. El dirigente insular subrayó que la pandemia ha demostrado que hay que dotar de recursos al sector público para que el ciudadano no se sienta «desprotegido».

Sánchez Navarrete, quien también alabó la «buena coordinación» entre consells y ayuntamientos, indicó que el Gobierno tendrá en cuenta el factor de insularidad de las Pitiusas en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del próximo año.