Un test de antígenos en una farmacia de Ibiza. | Toni Planells

Sigue la escalada de contagios en Ibiza y Formentera. Las Pitiusas sumaron ayer otros 707 positivos y se confirmó el fallecimiento de un hombre de 85 años que permanecía ingresado en la Unidad F de Medicina Interna de Can Misses.

Según los últimos datos facilitados por la Conselleria balear de Salud, las Pitiusas suman 6.521 casos activos en total, de los que 6.153 corresponden a Ibiza y 368 en Formentera. El número de hospitalizados procedentes de esta isla no varió en la jornada de ayer con siete pacientes ingresados, uno de ellos en la UCI del hospital mallorquín de Son Espases. El hospital Can Misses registró ayer 40 pacientes ingresados por coronavirus, tres de ellos en su UCI.

En Baleares, en la última jornada se detectaron 4.103 pruebas positivas, con lo que la tasa de positividad asciende al 34,88 por ciento.

Profesionales
Pero, sin duda, uno de los datos que más llamó la atención ayer es el relativo a los contagios entre sanitarios: 104 profesionales son positivos en estos momentos y un total de 220 permanecen bajo vigilancia activa. Cabe destacar que la información sobre los contagios entre sanitarios llevaba varios días sin ser actualizada, de ahí el gran salto registrado en las cifras que ofreció ayer Salud.

Fuentes de Can Misses reconocieron que el crecimiento en el número de sanitarios afectados por el virus ha sido progresivo y paralelo a la subida de casos en las Pitiusas. La situación se está gestionando «con dificultad», según explicaron también, puesto que esta explosión de contagios entre los trabajadores de la Sanidad se produce en otras zonas del país, limitando la posibilidad de contratar refuerzos. «Las opciones en cuanto a contrataciones son muy limitadas», insistieron.

Según destacaron, sanitarios bajo vigilancia activa están teletrabajando, realizando labores de seguimiento de otros enfermos. Para afrontar esta inusual situación, otra de las posibilidades es que profesionales en activo pueden doblar jornadas de manera voluntaria.

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Desde Can Misses manifestaron además que, a pesar del progresivo aumento de hospitalizados, por ahora el plan de contingencia del hospital no prevé ampliar espacios dedicados a pacientes con Covid ni alterar la actividad quirúrgica programada. Según recordaron, este plan marca la manera de actuar en cada preciso momento de la pandemia.

«Es cierto que la hospitalización va subiendo, pero quedan camas libres en la unidad F para pacientes positivos. Hasta que no se llegue al tope en esta unidad, no se pasará a la siguiente fase del plan que contemplaría utilizar habitaciones situadas en la unidad G de Can Misses», señalaron.
Desde el Área de Salud insistieron en que la situación se va analizando día a día, por lo que los cambios organizativos pueden ser importantes en una sola jornada. El objetivo último es salvaguardar la actividad quirúrgica.

Sobre los pacientes ingresados con Covid, desde el Área de Salud pitiusa reconocieron que en esta sexta ola permanecen menos tiempo en el hospital -también los ingresados en UCI- lo que influye directamente en la ejecución del plan de contingencia de Can Misses. Si la UCI se mantiene en los niveles actuales, con pocos afectados por coronavirus, es más fácil que la unidad no deba ampliarse hacia el área quirúrgica, algo que sí sucedió en anteriores olas, explicaron fuentes del hospital.

En estos momentos, el perfil de la persona que ingresa por Covid es hetereogéneo, con pacientes a partir de unos 40 años, algunos con patologías previas. Según detallaron desde Can Misses, entre los vacunados el impacto del virus es menor, por lo que se recuperan antes.

Capacidad de vacunación
El Área de Salud de Ibiza y Formentera insistió ayer en su capacidad para ampliar horarios y líneas y responder a toda la demanda de vacunación, principalmente ahora que se han ampliado las franjas de edad para las dosis de refuerzo. Así, en Can Misses probablemente la próxima semana se abra una nueva línea de vacunación -cuatro en el hospital- ampliando también los horarios de atención. «En función de la demanda, vamos respondiendo», aseguraron ayer desde el hospital.

En la actualidad, entre ambas islas hay en activo hasta ocho líneas de vacunación. «La de los 40 a 50 años es una franja que respondió muy bien a la vacunación y lo ha vuelto a hacer a la hora de pedir la dosis de refuerzo», concluyeron.