El médico investigado, en una manifestación contra las medidas de prevención del coronavirus. | Arguiñe Escandón

El bebé que nació en un agroturismo en un parto asistido presuntamente por el médico negacionista de Formentera suspendido y que tuvo que ser trasladado al hospital de Son Espases continúa ingresado en la UCI pediátrica del hospital mallorquín, según informó el miércoles el Área de Salud de las Pitiusas.

El pequeño sufrió una parada cardiorrespiratoria tras nacer el lunes en un parto asistido de manera privada en un agroturismo de Ibiza y fue trasladado de manera inicial al hospital Can Misses, desde donde fue evacuado más tarde a Son Espases debido a la gravedad de su estado.

Desde la Guardia Civil informaron de que continúan con la investigación para determinar el grado de participación en el parto del médico suspendido de colegiación por negacionista. Según indicaron desde la Oficina Periférica de Comunicación (OPC), por el momento se está recabando toda la información y tomando declaración a las personas que pudieron estar presentes en el parto para hacer una recomposición de los hechos que acabaron con un neonato en estado crítico.

Explicaciones del médico

Tal y como avanzó Periódico de Ibiza y Formentera en su edición del miércoles, el médico negacionista, Ángel Ruiz Valdepeñas, confirmó su participación en el parto a petición de la familia, por lo que sí asistió a la parturienta y al bebé. De hecho, precisó a este rotativo que el bebé nació «perfectamente» y que, por motivos que se desconocen, entró en parada cardiorrespiratoria. Este médico reconoció, además, que asiste una decena de partos privados en viviendas al año.

Noticias relacionadas

Cabe recordar que el Colegio de Médicos de Baleares (Comib) sancionó el pasado mes de mayo al médico presuntamente implicado en el parto con una suspensión de colegiación durante seis años y una multa de 16.660 euros por negar la pandemia de COVID-19. Así lo comunicó la institución en un comunicado después de notificar al afectado la resolución que procedía de un expediente disciplinario por vulneraciones graves de múltiples artículos del Código de Ética y Deontología Médica. El expediente se abrió en septiembre de 2020 tras manifestaciones del facultativo en redes sociales y otros medios de comunicación negando la pandemia por SARS-CoV2 y llamando a no usar mascarilla y a desobedecer las medidas de distanciamiento social establecidas por las autoridades.

El Comib consideró que los hechos eran «de extrema gravedad y de una gravísima irresponsabilidad, pues suscitaban un estado de confusión, miedo y alarma social, lo que supone un importante riesgo para la salud pública». Ruiz Valdepeñas insistió a este rotativo que no está inhabilitado puesto que «todavía no existe una sentencia firme al respecto» y señaló que sigue pagando su cuota al Colegio de Médicos de Baleares (Comib), que es de 400 euros. El médico afirmó que no ha abonado, porque ha recurrido, la multa de 16.000 euros impuesta por el Colegio de Médicos y afirmó que ha denunciado al presidente de este colegio profesional por atentar contra su honor.

El Colegio de Médicos de Baleares insiste en que un médico suspendido no puede ejercer

Desde el Colegio Oficial de Médicos de Baleares reiteraron que cuando un médico está suspendido no puede ejercer su profesión. En el caso del médico de Formentera, según el COMIB, esta persona sí tendría la colegiación suspendida y, por lo tanto, no podría ejercer la profesión de médico. «Un médico suspendido no puede ejercer de ninguna de las maneras ni el ámbito privado ni el ámbito público porque la colegiación es obligatoria en todo el país. Ha sido gravemente sancionado y no puede practicar la Medicina en todo el territorio español», reiteró Carles Recasens, vicepresidente del Comib.

Desde este colegio profesional no descartan plantear alguna acción, tanto de tipo colegial como judicial. Habría que distinguir, según apuntó Recansens, en si el médico pudo ser contratado por una familia para que la mujer diera a luz o, si en un encuentro casual, intentó auxiliar a la embarazada que se puso de parto. «En cualquier caso, la situación es alarmante y preocupante en la medida de que esta persona sigue con las mismas manifestaciones con el tema del negacionismo y que ahora se vea, aunque sea casualmente, en este episodio en el cual el gran perjudicado es el bebé», expresó. Recasens recordó que Ángel Ruiz Valdepeñas, ejerciendo su derecho, presentó un recurso contencioso-administrativo contra la instancia de la Organización Médica Colegial, que ratificó la postura del Colegio de Médicos de Baleares.

Recasens lamentó lo sucedido con el bebé y recordó, además, que tanto el Comib como la Sociedad de Ginecología y Obstetricia siempre se recalca que el parto es un momento delicado.