Una imagen de un conjunto de viviendas. | Daniel Espinosa

El Govern balear confía en que el Gobierno central reduzca el plazo de 18 meses que tiene previsto para que pueda aplicarse le Ley de Vivienda y, de esta forma, poder contar con las herramientas que le proporciona la legislación nacional para poder desarrollar plenamente la autonómica. Así lo aseguraron desde la Conselleria autonómica de Vivienda, que matizaron a su vez que «la ministra habla de un plazo máximo de 18 meses que no tiene por qué agotarse», por lo que esto «no va a afectar a la aplicación de la ley de la vivienda porque son ámbitos diferentes».

Sin embargo, la ley estatal es la que aporta las herramientas necesarias para que la autonómica pueda, entre otras cosas, regular los precios del alquiler «y desde el Govern lo celebramos porque es una de las reivindicaciones que teníamos desde hace tiempo».

Otro de los aspectos que necesita el Govern balear de la legislación estatal es la definición exacta de lo que es un gran tenedor para, entre otras cosas, conocer a cuántas personas y a cuántas viviendas afectará la normativa en la isla de Ibiza. «No tenemos esta cifra porque aún no sabemos cómo queda la definición de gran tenedor en la ley estatal, por lo que no sabemos a cuántas personas físicas o jurídicas afectará», explicaron desde la Conselleria

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«Brindis al sol»
Pero, teniendo en cuenta que la ley estatal no entrará en vigor hasta 18 meses después de su tramitación parlamentaria, que no se conoce cuánto durará dicha tramitación y que a la legislatura en Baleares le quedan escasamente 15 meses, será muy complicado que se puedan aplicar las citadas herramientas en la legislación balear antes de las próximas elecciones. En caso de que el texto legislativo sea recurrido ante el Tribunal constitucional, como todo parece apuntar, la Ley estatal de Vivienda quedaría paralizada hasta que decidiera el alto Tribunal.

Desde el Partido Popular, su portavoz en el Parlamento autonómico, Toni Costa, aseguró que la Ley balear de Vivienda «es un brindis al sol esta legislatura», ya que no llegará a aplicarse en su totalidad, «aunque denota cuál es la visión de la política de vivienda de la izquierda y no dudará en aplicarla en la próxima legislatura si gobierna». De hecho, reconoció que si no la han podido poner en práctica en esta legislatura «es porque Sánchez ha llegado tarde en aprobar su ley».

Costa insistió en que, si el Partido Popular gobierna la próxima legislatura, «no se aplicarán las medidas de la ley estatal en ningún lugar de Baleares». De hecho, garantizó que «no habrá ninguna zona tensionada en el archipiélago donde se aplique la regulación de precios del alquiler de viviendas». Asimismo, subrayó que «ningún Ayuntamiento del PP aplicará la subida del IBI a los pisos vacíos».

Y es que, para los populares, las políticas de vivienda que están llevando a cabo tanto desde el Govern balear como desde el Gobierno central son «contraproducentes» y lo único que van a conseguir «es que se incrementen los precios del alquiler y que se fomente el mercado negro». Para Toni Costa, la solución al mercado d ella vivienda pasa por «aumentar la oferta, garantizar que se cobren las rentas, combatir a los okupas y bajar los impuestos».