Maria Bofill conservadora del Museu Arqueològic d'Eivissa i Formentera. | Manu Gon

El Museu Arqueològic d’Eivissa i Formentera ha organizado hoy una interesante visita a sus zonas menos conocidas del Museu Monogràfic de Puig des Molins con motivo de la celebración del Día Internacional de la Mujer y la Ciencia.

Durante dos horas los asistentes han podido conocer como trabajan algunos de los profesionales del museo, en la mayoría de las ocasiones alejados de los focos mediáticos que supone posteriormente ver una pieza expuesta en una vitrina. De hecho, su nombre ya es significativo, Darrere les vitrines. «Esta es una actividad que organizamos cada año para abrir las puertas a los departamentos y salas del museo que no son tan conocidas por el gran público y este año nos parecía que podía ser una buena idea hacerlo coincidir con el Día de la Mujer y la Niña en la ciencia porque actualmente buena parte del equipo técnico del museo somos mujeres», ha asegurado a Periódico de Ibiza y Formentera, Maria Bofill, conservadora del MAEF.

En este sentido, en la visita se ha explicado el proceso desde que llega la pieza al museo directamente desde la excavación o el yacimiento hasta que se almacena y difunde a los visitantes. «Intentamos que todo el mundo conozca como se restauran los bienes arqueológicos, como se tratan los materiales, si se hace o no una conservación preventiva, como posteriormente se guardan y archivan y como se preparan las actividades a través de las cuales el departamento de didáctica transmite todo lo que tenemos, tanto a las generaciones futuras como a todos los visitantes», explica Bofill.

Además, para una mayor comprensión los asistentes han podido ver en primera persona como es el trabajo en los distintos departamentos. Por ejemplo, en uno de los cuatro almacenes del museo, Bofill explicó los cajones donde cada pieza está perfectamente almacenada, separada por tipo de material, protegidos por cajas individuales y especiales y con un número de referencia que es «como su propio DNI y que sirve para saber en todo momento donde está ubicada y tener a mano toda su información en una base de datos».

Por su parte, el departamento de conservación, donde trabajan Ana Mezquida y Elena Jiménez, dieron una pequeña clase de como es su función ya que, según Jiménez, «solo el 1% de todo lo que llega a un museo acaba siendo expuesto».

Elena Jiménez resturadora del Museu Arqueològic d'Eivissa i Formentera.

Su labor es muy importante ya que es fundamental que los almacenes estén en continuo mantenimiento, con una temperatura y humedad constante, y lo mejor organizados posibles. Algo que no es tarea sencilla y de lo que se ocupa fundamentalmente Ana Mezquida quien chequea cada una de las piezas que llegan al museo, por pequeñas que sean, las identifica correctamente y, entre otras labores, les añade un número de seguimiento. Además su conocimiento como arqueóloga es muy importante a la hora de poder ayudar a investigadores de fuera y a una mejor comprensión de cada pieza.

Ana Mezquida_ técnica de archivos, biblioteca y museos del Museu Arqueològic d'Eivissa i Formentera.

Por último, todo esto no se podría conocer sin el trabajo que hace Carmen Mezquida, coordinadora del Gabinete Didáctico del museo. En su caso normalmente se encarga de transmitir su conocimiento y la historia de Ibiza y Formentera a los niños y a los visitantes de una forma amena, divertida y sencilla. Algo que consigue con unas interesantes maletas didácticas que tienen como objetivo «que acabemos amando nuestro patrimonio».

Carmen Mezquida coordinadora del Gabinete Didáctico. Vídeos: Manu Gon.