La consellera balear de Asuntos Sociales, Fina Santiago, en una imagen de archivo.

Las 18 personas que hasta hace poco trabajaban en la lavandería de la residencia Sa Serra, en Sant Antoni, van a perder su trabajo de forma inminente. De ellas, un total 16 trabajadores tienen diversidad funcional.

En un comunicado, los hasta ahora responsables de la lavandería, constituida con un Centro Especial de Ocupación, anunciaron el cierre.

Este CEO era gestionado desde 2015 por la Fundación de Atención y Apoyo a la Dependencia y Promoción de la Anatomía Personal de Baleares.

Según recordaron ayer, en las bases del concurso se exigía que, desde el inicio, las condiciones de explotación de la lavandería estuvieran a cargo de un Centro Especial de Ocupación.

La concesionaria, Mercado Actual SL, firmó en 2018 con la Fundación un último contrato de cuatro años de duración y posible prórroga por otros dos. La sorpresa vino el pasado octubre, cuando la Fundación informó que no se prorrogaba el contrato por diversos motivos, entre otros, la necesidad de recuperar instalaciones.

La consellera de Asuntos Sociales, Fina Santiago, negó ayer que esta recuperación de espacios esté relacionada con la propuesta de reservar habitaciones para trabajadores, tal como se ha hecho en Can Blai.

Según relató la empresa, los empleados del centro comenzaron entonces a cobrar el ERTE, una situación que ha durado hasta ahora, cuando deberán ser despedidos. De hecho, la concesionaria lamentó el daño que este cierre supone para el colectivo de discapacitados en Ibiza.

Desde el servicio de atención a la dependencia en el Consell d´Eivissa lamentaron el despido de estas 16 personas, más tras conocer que dicho cierre puede ser definitivo.

«En su momento, allí hubo una inversión importantísima porque se compraron máquinas adaptadas para que pudieran trabajar personas con diversidad. Nos preocupa que estas personas vulnerables pierdan su trabajo y no tengan su medio de subsistencia», lamentaron desde el Consell d’Eivissa.

«Que se cierre un Centro Especial de Ocupación de esta forma y no vuelva a abrirse, nos preocupa mucho», reiteraron.

Bien distinta es la versión ofrecida por la Conselleria de Asuntos Sociales del Govern balear. En un comunicado, aseguró ayer que Sa Serra tuvo que asumir en 2020 y con medios propios el servicio de lavandería «ante los reiterados incumplimientos de la empresa contratada».

Además, desde el Govern explicaron que no se ha podido restablecer el servicio a pesar de las facilidades otorgadas a la empresa, incluyendo una reducción del 50% en los cánones y suspensiones temporales del contrato.

Según Conselleria, los «reiterados incumplimientos» de la empresa provocaron incluso que la Fundación de Atención a la Dependencia tuviera que ejecutar una serie de obras en la residencia y adquirir maquinaria para poder prestar el servicio con sus propios medios.

El contrato

La Conselleria balear de Asuntos Sociales recordó ayer que en 2018 se adjudicó a Mercado Actual SL la explotación comercial de la lavandería con el compromiso de encargarse de la limpieza de la ropa de usuarios y trabajadores de Sa Serra, así como de la lencería de la residencia y del centro de día. La empresa se comprometía a pagar una renta mensual de 4.500 euros, dando también servicio a empresas ajenas a la residencia.

En febrero de 2020, a petición de la exconcesionaria, se modificó el contrato y se redujo a la mitad la renta mensual. Además, solicitó la suspensión del contrato durante el estado de alarma, así como durante otros periodos, siendo el último el comprendido entre el pasado 1 de noviembre y el 31 de enero de 2022.

Según Asuntos Sociales, aunque la empresa reinició la actividad en diversos momentos, no volvió a prestar servicio a la Fundación.

Por todo ello, ante el «incumplimiento continuado del contrato y la inexistencia de garantías suficientes para cumplir las condiciones asumidas por la empresa», el Govern no ha prorrogado la concesión, asegurando que el servicio se realiza ahora con medios propios. Tampoco se prevé sacar de nuevo a concurso la explotación del servicio de lavandería.