Homenaje a la diseñadora de joyas Elsa Peretti

Elsa era elegante, alta, con un pelo muy corto y un estilo sofisticado. Se fue a vivir a Nueva York, y allí triunfó diseñando joyas para Halston y Giorgio di Sant Angelo, consiguiendo que la plata pasara a ser un metal de lujo y que sus diseños no pasen nunca de moda.

Durante los diecinueve otoños seguidos que pasé en Nueva York me vi mucho con Elsa. Y a principios de los años 70 empecé a fotografiarla y a publicar artículos sobre ella en periódicos y revistas en España. Elsa aparece en mi documental Carlos Martorell Polifacético de YouTube.

Salíamos a divertirnos a fiestas y discotecas. Me presentó a mucha gente del mundo del arte y la moda de Nueva York. Y colaboré en el montaje de dos fiestas en su casa, con invitados como Mick Jagger y Bianca, Andy Warhol, o Marisa Berenson.

Le gustó mucho mi antigua casa de campo, sin electricidad, en Sant Carles y acabó comprando una casa en Sant Miquel.

Debido al gran éxito que tuvieron sus diseños, en 1972, en los grandes almacenes Bloomingdale’s, Elsa Peretti fue contratada por la joyería Tiffany & Co, en 1974. Sus diseños para Tiffany son los que tienen más éxito de ventas. Y acabó diseñando vajillas y cristalería.

Elsa Peretti recibió muchísimos premios y sus diseños pueden verse en el Museo Británico, en el de Bellas Artes de Boston, en el de Bellas Artes de Houston y en el Museo de Arte de Indianápolis.

Una noche Elsa me presentó al presidente internacional de Tiffany, y me encargó la inauguración de la joyería en Barcelona, en el Hotel Mandarin, un evento en la Embajada de Estados Unidos de Madrid y otros dos eventos más.

Elsa fue una gran filántropa, y en recuerdo a su padre Nando, en el año 2000, creó la Fundación Nando Peretti.    Y en el 2005 la Fundación Nando y Elsa Peretti.

En Barcelona fundó el Teatre Akàdemia, a cuyas representaciones estoy siempre invitado.

Elsa vivió entre Nueva York, Barcelona y Sant Marti Vell, un pueblo de Gerona que ella restauró, y donde falleció, hace un año, apunto de cumplir 81 años. Debido a su avanzada edad disfrutó muy poco de su casa en Ibiza. Voy a proponer a Tiffany organizar un importante evento homenaje a Elsa Peretti, cuando nos liberemos de las mascarillas.