Turistas, que asisten a una visita guiada por el casco urbano de Ibiza. | Marcelo Sastre

La Semana Santa ha resucitado el turismo internacional en Ibiza y, además, sigue manteniendo a los visitantes nacionales. Las calles y las zonas más turísticas, cercanas al corazón de la ciudad, se colmaron este sábado de decenas de personas dispuestas a disfrutar del buen tiempo, después de varios días de lluvia, con una copa en la mano.

Desde primera hora de la mañana, el bar flotante de la playa de Talamanca albergó a varios turistas en su desenfadada terraza pegada a la orilla del mar. «Menos mal que ha salido el sol. Nos vamos el martes y queríamos aprovechar los días de playa antes de volver a Bolonia», destacó el italiano Luigi Corticelli mientras se tomaba una cerveza con sus amigos. Muy cerca estaba la familia inglesa Moltui. Tom, el padre, señaló que es la novena vez que visitaba Ibiza pero, sin duda, es la más especial de todas. «Es nuestro primer viaje postpandemia. Estamos muy felices», puntualizó frente al mar.

La lluvia da una tregua tras varios días. Foto: Marcelo Sastre.

Este sábado la temperatura rondó los 24 grados y el sol, que brillaba en el cielo, empujó a los turistas a desplazarse hasta la playa. Es el caso de las portuguesas Catalina Machado, Sofía Morera y Diana Angels. Estas amigas de Oporto llegaron a Ibiza hace una semana y, aunque el clima no les ha acompañado durante todo este tiempo, señalaron a Periódico de Ibiza y Formentera que aprovecharon la situación para hacer un turismo más cultural por la isla.

«Hemos visitado Dalt Vila, la muralla y el baluarte de Sant Joan. Hemos disfrutado mucho de la isla, esperamos volver pronto», subrayó Catalina Machado mientras se embadurnaba de crema solar en su primer día de playa del año. Cerca de estas tres amigas, diferentes grupos de personas recostadas llenaron la playa de Talamanca de una gran diversidad cultural gracias a los turistas extranjeros desplazados a la isla.

Un grupo de amigas portuguesas en la playa de Talamanca. Foto: Marcelo Sastre.

Vuelos

Sin ir más lejos, según AENA, el aeropuerto de Ibiza operará entre este Jueves Santo y el Lunes de Pascua un total de 863 vuelos, 424 nacionales y 439 internacionales, siendo el día de mayor trasiego el lunes 18 de abril con 176 vuelos. En este sentido, la mayoría de los visitantes que este sábado transitaban por el atestado Paseo Marítimo eran, especialmente, italianos, ingleses y portugueses. Es el caso de un grupo de amigos llegados de Oxford que estuvieron a punto de perder el barco a Formentera. «A Formentera solo vamos a pasar el día. En Ibiza nos quedaremos todas las fiestas de Semana Santa», subrayó Adele Paul antes de comenzar a subir por la pasarela de la embarcación.

A 50 metros, una gran multitud de personas, que rodeaban a una mujer de pelo rizado, asistieron a una visita temática por Dalt Vila. Más de 10 personas, cámara en ristre y llegadas de la Península, escuchaban a la guía cerca de la escultura en bronce que rinde homenaje a la cultura hippie de la isla.
En las terrazas, decenas de mesas ocupadas por turistas, que venían del casco urbano, llenaban el puerto de Ibiza de un ambiente jocoso. Lo mismo ocurrió este sábado en el paseo de Vara de Rey, epicentro de la ciudad, donde varios visitantes colmaron los bares de la zona para saborear las especialidades gastronómicas locales.