Más de 150 ucranianos celebraron ayer la Pascua ortodoxa que se basa en una misa solemne y en la bendición de cestas repletas de alimentos. | Marcelo Sastre

La comunidad ucraniana de Ibiza celebró ayer la Pascua ortodoxa de una manera «muy emotiva», según Vasyl Danyshenko, miembro de la Asociación Nuestra Ucrania. En total, más de 150 ucranianos festejaron ayer esta tradición con un tono nostálgico durante la misa oficializada por el párroco Dmytro Kyiashkono y por Marcelo Gabriel Jofré, administrador Parroquial de Santa Eulària.

Sin duda, una ceremonia muy especial puesto que el pueblo ucraniano de Ibiza no puede olvidar la guerra que está asolando a su país, donde muchos de ellos todavía tienen a sus familiares y amigos, «por lo que todas las plegarias de ayer fueron dirigidas a Ucrania, para pedir que se acabe el conflicto armado», destacó Vasyl Danyshenko.

Dos de las mujeres más emocionadas durante la celebración del acto religioso fueron las refugiadas Olga Plenkan y Vita Zaharaia, dos de las 35 personas que han llegado a Ibiza tras la invasión de Rusia. Según Olga Plenkan, originaria de Kiev, aunque está muy bien en la isla, cada día sueña con regresar a su país. Lo mismo le ocurre a la joven Vita Zaharaia, madre de dos niños pequeños. Ambas señalaron que están trabajando y que disponen de asistencia médica.

«Estamos muy agradecidas», explicó la más joven mientras movía su cesta cargada de alimentos que «da la tierra» como pan, cereales o verduras para que fueran bendecidas por Dmytro después de bordear la iglesia tras la solemne misa.