El joven dj, artista plástico y productor musical Alejandro Saporiti, conocido en el mundo de la música como Bröder, es la cabeza visible de Bresh, la última gran fiesta de moda en todo el mundo que llega esta noche a Pacha Ibiza. A sus 29 años, este joven argentino nacido en Buenos Aires, amable, cercano e hincha de Independiente de Avellaneda, está triunfando con una propuesta que ha sumado ocho fiestas con todo vendido de forma consecutiva en La Riviera de Madrid y que viene de arrasar ciudades como Miami, Nueva York, Milán o la Sala Apolo de Barcelona. Desde hoy, Bresh dará su salto a Ibiza de la mano de la discoteca Pacha con la misma filosofía con la que un grupo de amigos la pusieron en marcha en 2016, apostando por una diversión basada en ir a contracorriente, por la libertad colectiva, por fusionar todo tipo de músicas o por actuaciones sorpresas que nunca se anuncian en el cartel.

* La de esta noche en la discoteca Pacha Ibiza será su primera vez en la isla. ¿Tienen nervios después de haber conquistado a más de tres millones de personas y actuado ante cientos de miles de personas?

—Siempre hay nervios porque estamos hablando de Ibiza, el lugar soñado para todos nosotros. Actuar en Ibiza es como hacerlo en el Olimpo de los djs de todo el mundo y, por eso, más que nervios también tenemos una mezcla de responsabilidad por hacerlo lo mejor posible.

* Además, tendrán delante a muchos argentinos. La comunidad de este país espera con muchas ganas la fiesta de Bresh.

—Bueno, es la fortuna de que haya argentinos en todos los lugares del mundo. Estamos desperdigados de aquí para allá y está claro que poder estar delante de ellos en un sitio tan especial como la discoteca Pacha Ibiza también da muy buena onda a la actuación de esta noche.

* ¿Cómo han planteado el debut de Bresh en Pacha?

—Como algo realmente especial para todo el equipo porque, al final, es una recompensa a tantos años de trabajo por Argentina en los que hemos vivido grandes momentos y también otros no tan buenos provocados fundamentalmente por la aparición y el desarrollo de la pandemia del coronavirus.

* ¿Vendrá un equipo muy amplio para disfrutar de la experiencia?

—La verdad que sí. Casi todo el equipo que ha formado parte de Bresh desde el principio estará hoy en Ibiza porque una oportunidad así no se tiene todos los días. Además, nos acompañará nuestro increíble equipo de performances y actores que le dan un aire tan especial a Bresh, convirtiendo cada fiesta en algo único.

* ¿De Buenos Aires al cielo de Ibiza?

—Se podría decir que sí. Después de seis años trabajando relindo, en 2021 vivimos un subidón enorme en Estados Unidos y más recientemente en Madrid y Barcelona. Y ahora esperemos que también en Ibiza porque como ya le dije, la isla es el mejor sitio del mundo para cualquier dj.

* ¿Se lo imaginaban cuando empezaron en Argentina?

—Ni en broma. Pero sí que es el resultado de tantos años trabajando sin vacaciones para hacer disfrutar a tanta gente de tantas partes del mundo. De tanto trabajo por llevar la alegría y la diversión a tantos miles de seguidores. Eso es algo que no se puede describir con palabras y lo que hace tan especial una fiesta como Bresh y un trabajo como este.

* ¿Cómo surgió la idea de crear Bresh?

—Pues esto tiene mucha historia que contar. Fue como el agua que discurre por un puente y que a base de empujar y empujar se ha acabado desbordándose sin que de momento se le vea freno.

* ¿Es cierto que nació entre un grupo de amigos?

—Sí. Todo nació entre colegas que no terminábamos de encontrar una oferta nocturna en Buenos Aires que realmente nos gustara. Un espacio que pudiera ofrecer música variada como el pop, la cumbia, el reggeatón o la electrónica y que, además, fuera seguro, divertido y que cuando entraras el de seguridad no te mirara de arriba para abajo valorando si eres digno o no de entrar. En definitiva, un sitio divertido para desconectar de tus problemas cotidianos y sin dress code.

* Y rápidamente lo consiguieron. En su país se volvieron un fenómeno imparable.
—Es cierto. Poco a poco la idea fue creciendo, precisamente, porque el concepto transmite buen rollo, es divertido y era algo único y diferente a lo que se había hecho hasta ahora en nuestro país. Tanto que casi sin darnos cuenta pasamos de estar actuando ante 400 personas a comenzar a viajar por toda la Argentina y a estar delante de 10.000 personas en el año 2020 en Mar del Plata. Una auténtica locura.

* Y entonces llegó la pandemia. ¿Cómo les afectó?

—Pues si te digo la verdad mucho mejor de lo que nos esperábamos. Está claro que al principio fue un palo muy grande porque sanitariamente fue un desastre y porque afectó muy duramente a la cultura que fue la primera en cerrar y la última en abrir. Pero nosotros, en lugar de hundirnos, tuvimos reuniones por videollamada en las que decidimos transformar el veneno en medicina. En lugar de darnos por vencidos empezamos a seguir continuando la fiesta Bresh desde nuestras casas y a transmitirlas a través de Instagram para animar a la gente que lo estaba pasando tan mal. Poco a poco, lo fuimos consiguiendo y también casi sin darnos cuenta pasamos de tener 200.000 seguidores a un millón en apenas una semana. Fue otra de las grandes locuras que siempre recodaré en mi vida.

* ¿Eso fue lo que les animó a dar el salto internacional?

—Sí. Ten en cuenta que hubo un momento en el que ya teníamos seguidores de todo el mundo. Gente que aunque lo pasaba mal, cuando llegaba el sábado, se maquillaba y se ponía guapa en su casa para seguir la fiesta aunque estuvieran confinados. Eso es algo que te deja sin palabras y fue lo que realmente nos convenció de que podíamos llegar a todo el mundo.

* ¿Por qué decidieron elegir Miami en Estados Unidos?

—Por un motivo de oportunidad. Fue en 2021 y a pesar de que el coronavirus estaba en su peor momento en otras partes del mundo siempre fue una ciudad donde todo iba mejor porque las vacunas funcionaban muy bien. Eso hizo que la cultura, la música y los espectáculos se siguieran desarrollando y, por eso, también de modo todo muy rápido nos vimos actuando ante 10.000 personas. Brutal.

* Y de ahí a Madrid, Barcelona y ahora Ibiza. ¿Cuál es el techo que tiene Bresh?

—No le sabría decir. En Madrid y Barcelona el éxito también fue enorme, con todas las entradas para las fiestas vendidas y todo en apenas un año. El futuro y el techo de la fiesta dependerá de su gente y de su público porque al final somos quienes somos gracias a ellos.

* ¿Qué tiene esta fiesta para que haya conseguido conectar con tanta gente de partes tan distintas?

—Esta es una pregunta que no tiene una respuesta fácil. Tal vez sea la energía que transmite en sí misma la fiesta o que en ella todo el mundo se siente libre con una música que es bailable, reconocible y que en muchos casos se sabe de memoria. O tal vez también ayude que el dj que está pinchando piensa directamente en el público y no en sí mismo como a veces sucede con otras fiestas.

* Entonces, ¿cómo se cataloga Bresh?

—Como una mezcla de todo tipo de músicas. Aquí podrás encontrar música latina, reggeatón, pop, electrónica, hip hop, cumbia y, sobre todo, en español. Está repleto de temas que no se discuten y que están pensados directamente para hacer vibrar al público. Es, fundamentalmente, una fiesta en la que se piensa sobre todo en los seguidores ya que es a ellos a quienes nos debemos y por los que somos quienes somos.

* ¿Por eso han conseguido tener un público tan fiel en todo el mundo?

—Pienso que sí. Es alucinante que hace unos días estuvimos en Japón, tan lejano para muchas cosas de lo latino, y allí también vendimos todas las entradas en apenas unos días. Al final hemos tenido la inmensa fortuna de haber convertido a Bresh en una gran marca que se va conociendo en todo el planeta. Y si eso ha sido posible es por el público fiel que tenemos. Todos ellos forman parte de la historia de Bresh gracias a la pasión y el cariño que nos dan en todo momento y allá donde vamos