La sandía ibicenca ya ha empezado a llegar a los mercados. | Toni Planells

Las primeras sandías ibicencas de la temporada ya están empezando a hacer acto de presencia en los mercados ibicencos. Así, en el Mercat Nou, no eran poco los puestos de frutas y verduras que, por fin, exhibían este símbolo gastronómico del verano.

«Para Sant Joan siempre suele haber sandías», explicaba Marga Riera, de Frutas Riera. «Es verdad que algunos la siembran en ‘tunelillos’ (pequeñas estructuras de plástico dispuestas sobre la planta para resguardarla de las inclemencias del tiempo y así poder cultivar la sandía más pronto dentro del calendario), pero este año no ha hecho falta», explicaba Riera, que recordaba que las horas de sol son las que hacen que este fruto madure y adquiera su dulzor característico. «De momento todavía hay poca», reconocía Marga, hecho que eleva el precio de la sandía a 2,25 euros el kilo. Casi un euro de diferencia con el precio de esta fruta en pleno apogeo de su cosecha, en verano, cuando su precio llega a ser hasta un euro más barato.

El puesto de Riera en el Mercat Nou d'Eivissa. Foto: Toni P.

Sin embargo, Riera también habla de las sandías de un tamaño más discreto, «las que puedes encontrar en los supermercados», que se encuentran a precios mucho más económicos, y que explica que, como ocurre con toda la fruta, «siempre hay de primera, de segunda, de tercera... Con la sandía pasa lo mismo. Aquí tenemos de la grande, de primera, que se nota un poco en el precio y mucho en el sabor, mucho más dulce y jugoso».

Sandía ibicenca

Cualidades que la sandía ibicenca presenta en su grado más alto. «La ibicenca es una sandía mucho más acuosa y dulce», describía Marga Boned, de Frutas Boned, respecto a la sandía que llega de Valencia sin pepitas, que «es mucho más acorchada y seca, aunque es la que suelen preferir los extranjeros».

Sobre los trucos para elegir el mejor ejemplar de sandía, Riera explicaba que «cuanto más grande mejor, será más dulce». En cuanto a comprobar la madurez del fruto, Riera confirmaba que los típicos golpecitos son los que dan la respuesta. «Debe sonar claro, si suena ‘ploc-ploc’ es que no está bien madura», explicaba sin dejar de recurrir a la onomatopeya.

Sandías en el puesto de frutas y verduras Boned. Foto: Toni P.

Por Sant Joan, una de las frutas más consumidas tradicionalmente, con permiso de la sandía, es el albaricoque. Mucha culpa del consumo de esta fruta la tiene su papel en la receta de la tradicional coca de Sant Joan. Marga Riera reconocía que sus albaricoques no son de los más adecuados para hacer la coca de Sant Joan. «Los que tengo yo son un poco más acuosos. Para la coca de Sant Joan hace falta que sean un poco más secos».

En Boned no ocultaban cierta preocupación ante la falta de este fruto esta temporada, «al menos nosotras, este año no tenemos albaricoques para Sant Joan. No sé si será por las lluvias, pero esta temporada nos ha faltado mucha fruta», explicaba contrariada Boned.