Una imagen de la calle este martes por la tarde. | Arguiñe Escandón

Los problemas de vertidos para los vecinos de Sa Llavanera suman y siguen. Un agua pestilente procedente de las alcantarillas cercanas a la zona inundó este martes las calles adyacentes al edificio Los Girasoles. Según relataron los vecinos, esta incidencia estaría produciéndose desde hace unos días.

Desde la Conselleria de Medio Ambiente confirmaron este martes que no había habido nuevas incidencias en la depuradora o en el torrente de Sa Llavanera. Por su parte, desde el Ayuntamiento de Ibiza explicaron que el vertido se ha debido a un atasco en la tubería del edificio Los Girasoles y que se ha procedido a desatascarla.

Una vez más, las altas temperaturas que se registran estos días en Ibiza provocaron un hedor insoportable en todo el barrio, además de otros problemas causados por los enormes charcos del agua que emanaba de las alcantarillas.

Algunos vecinos aseguraron haber visto un camión de la empresa encargada de limpiar los restos de los vertidos fecales cuando se producen en este lugar de Vila.

En las últimas semanas, diversos fallos eléctricos han provocado también vertidos fecales en el torrente de Sa Llavanera. El último de ellos el pasado viernes, cuando se registró una incidencia sobre las 7 de la mañana que quedó solventada antes de las 9.

Uno de los vecinos afectados, Toni Riera, relataba cómo, al salir de su casa, un día más se topó con toda la zona del torrente inundada por aguas fecales, lo que causaba un olor nauseabundo. A comienzos de semana, este vecino también lamentó que, tras un vertido, el agua fecal se queda estancada y «es un nido de porquería.