La procesión marítima regresa a es Cubells

Un año más la reina de los mares volvió a navegar las aguas de la playa de Es Cubells, uno de los pueblos de la isla en los que con más fervor se celebra la Virgen del Carmen. Los vecinos y visitantes pudieron vivir así una de las celebraciones más emotivas y esperadas del año: la tradicional procesión marinera por la Virgen del Carmen.

Desde las 10:00 horas de ayer, medio centenar de personas, entre residentes y turistas, disfrutaron de la misa solemne en honor a la patrona del mar en la pequeña parroquia de Es Cubells. Una ceremonia que fue oficializada por el párroco del municipio, Josep Lluís Mollà. Tras el acto, llegó el momento del recorrido por tierra y, sobre todo, de la procesión marinera.

«La procesión en Es Cubells es muy diferente. En el resto de localidades la comitiva sale desde el centro del municipio y se dirige al mar, la nuestra conlleva un esfuerzo extra», destacó el vecino del pueblo Javier Marí mientras recorría una de las zonas abruptas de la ladera ubicada en el acantilado.

«Paisaje increíble»

«El sacrificio para realizar la procesión marinera merece la pena. Este paisaje es increíble», subrayó Pilar Granados mientras descendía hacía la playa. Esta mujer, que portaba un ramo de flores en sus manos, destacó que para ella Es Cubells es su refugio en la isla y que este año está viviendo el día de la Virgen del Carmen, patrona de los marineros, con mucha emoción.

«Ayer mi hijo hubiese cumplido 40, pero falleció hace dos años. Lo recuerdo todos los días, pero hoy honraré su memoria durante la ofrenda de flores en el mar», explicó Pilar Granados durante el recorrido. Muy cerca de esta mujer estaba el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Sant Josep, Vicent Roselló, con su familia.

«Las fiestas en honor a la Virgen del Carmen son uno de los festejos principales del pueblo en verano. Reúne a decenas de devotos», explicó Roselló a Periódico de Ibiza y Formentera. En este sentido, subrayó que suele realizar la procesión todos los años, pero era la primera vez que participaban sus hijos.

Ambos, muy expectantes, descendieron la ladera con soltura y embarcaron junto a la Virgen y el resto de las personas, que ayer se congregaron en torno a la reina de los mares, para celebrar la ofrenda floral desde la barca. Sin duda, el amor a familiares y amigos fallecidos y sus recuerdos es el homenaje que la tradición marinera ofrece a los fieles. Un festejo muy arraigado en este pueblo costero de Es Cubells.