Carlos Muñoz, delegado de participación ciudadana de la Policía Nacional. | Arguiñe Escandón

La denuncia es el punto de partida para combatir los delitos de odio y otros incidentes discriminatorios pero, según Carlos Muñoz, delegado de participación ciudadana de la Policía Nacional, las infradenuncias de estas infracciones siguen siendo un gran obstáculo para acabar con esta lacra y abordar su problemática.

De hecho, Muñoz afirmó este viernes que el 80% de las víctimas no se atreven a visibilizar la situación informando de lo sucedido. «Tienen miedo a la reacción de la sociedad. Es más, muchas personas evitan denunciar por la respuesta que da el sistema a una víctima», subrayó este agente durante la tercera jornada local para la prevención de los delitos de odio y discriminación celebrada en el Recinto Ferial de Ibiza.

Atención a las víctimas

Este evento, organizado por la Unidad de Participación Ciudadana de la Policía Nacional de Ibiza y el Consell de Ibiza, se ha celebrado este viernes con motivo del Día Europeo en memoria de las víctimas de los delitos de odio.

A los pocos minutos del comienzo de esta jornada, los ponentes del acto pusieron el foco en la atención y asistencia a las víctimas, haciendo hincapié en la respuesta policial ante estos delitos. En este sentido, el veterano abogado del turno de oficio Víctor Jiménez señaló que queda mucho camino por recorrer, debido a la falta de recursos técnicos y humanos que alberga el sistema. «El periplo de una víctima desde que declara en la comisaría hasta que llega al Juzgado es inhumano, hasta el punto de retirar la propia denuncia», subrayó Jiménez durante su participación.

También puntualizó que la figura del psicólogo, una labor muy importante para la atención de los damnificados, no está habilitada en las comisarías. Por su parte, Carlos Muñoz subrayó que sí es cierto que el circuito de asistencia a las víctimas es duro, y que el trato a estas personas es «mejorable» en Ibiza, pero explicó que desde esta unidad policial están trabajando con las personas, grupos y asociaciones pertenecientes a los diferentes colectivos de lucha contra los delitos de odio.

Rápida identificación

«Uno de los objetivos del servicio es proporcionar herramientas para poder detectar, lo antes posible, incidentes relativos al racismo, la xenofobia y la intolerancia», aseguró Manuel Hernández, comisario de la Policía Nacional en Ibiza durante su intervención.

Por eso, desde la Unidad de Participación Ciudadana, formada por el propio Carlos Muñoz y por la agente Lidia Romero, apuntaron que una de las finalidades de este departamento es identificar las «luces rojas», localizar de forma inmediata, gracias a los protocolos locales de actuación, las infracciones más frecuentes para reducir el alto porcentaje de delitos de odio que quedan sin denunciar.

«Hay que poner a la víctima en el centro de todo. En todo tipo de agresiones a personas es necesario prestar especial atención a los indicadores de polarización de odio», subrayaron.
Unos indicios que permiten orientar la investigación de un delito para mejorar la eficacia policial en la investigación. Asimismo, señalaron que la mayoría de infracciones penales en la isla están relacionadas con discriminación LGBT.

Además de estos indicadores, este servicio también ha puesto en marcha, entre otras actuaciones, las Unidades de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) y la impartición de charlas formativas en centros educativos. «Son jornadas sobre sensibilización y, sobre todo, prevención», puntualizó Muñoz.