Armengol, con Vicent Marí, este lunes. | Daniel Espinosa

La presidenta del Govern balear, Francina Armengol, ha asegurado este lunes que el decreto contra el turismo de excesos del Ejecutivo autonómico «es un buen decreto ley y está dando soluciones a quien lo aplica».

«El problema es que el Ayuntamiento de Sant Antoni no está aplicando el decreto ley. No se realizan las sanciones que corresponden; no se abren los expedientes; no se persigue el turismo incívico, y eso es lo que provoca el mal nombre a la isla de Ibiza», consideró la dirigente balear.

Así valoró Francina Armengol las manifestaciones formuladas desde la Asociación Hotelera de Sant Antoni contra el decreto de turismo de excesos del Govern. En este sentido, la presidenta recordó las palabras del presidente del Consell, Vicent Marí, quien, en su discurso del 8 de Agosto, aseguró que en la isla no se quiere a determinado tipo de visitante.

«Hay normativa, hay dinero. Vamos a ejecutar y, por tanto, los responsables políticos, el alcalde de Sant Antoni en este caso, debe ejecutar y hacer cumplir la normativa y el Consell d´Eivissa debe cumplir con la normativa de persecución de alquileres vacacionales ilegales porque es su competencia y porque hemos puesto recursos para contar con más inspectores al servicio de la ciudadanía», explicó la dirigente balear.

Ante ello, Armengol reclamó a las instituciones ibicencas «un poco de lealdad y trabajo conjunto». Tras las críticas de la presidenta, el alcalde de Sant Antoni, Marcos Serra, contestó asegurando que «no creo que tengan nada que ver las declaraciones de los hoteleros con mi gestión».

Serra afirmó que se han interpuesto sanciones a través del decreto de excesos y el Consell también ha actuado, algo que, hasta ahora, no había llevado a cabo el Govern.

«Las declaraciones de los hoteleros son las mías. Sant Antoni no es Magaluf y lo que hacen es desprestigiar toda la campaña promocional que hacemos para mejorar la imagen turística de Sant Antoni», concluyó el primer edil, aconsejando a Armengol que «acepte las críticas que le han hecho los hoteleros».

Los hoteleros de Sant Antoni, a través de un comunicado, lamentaron que llevan años «apostando por el cambio del modelo turístico» del municipio con su apuesta por las reformas de los establecimientos, «con importantes inversiones que, salvo excepciones, han supuesto un aumento de categoría y siempre una mejora de la calidad en todos los sentidos».

También consideraron que las normas deben contribuir e incentivar al cambio, «no al contrario». En este sentido, señalaron que el actual decreto de excesos «no nos parece la mejor vía para que el cambio real se produzca ni, por tanto, la ampliación de su perímetro de aplicación.

Pensamos que, lejos de contribuir a la solución, lo que hace es perjudicar la imagen y el esfuerzo que todos estamos haciendo».