La abogada junto a su cliente que se encontraba en el momento del desalojo ayer por la mañana entrando a los juzgados.

La propietaria de Casa Lola, Francisca Sánchez, fue detenida el pasado jueves acusada de un presunto delito de extorsión contra uno de los grupos de personas que permanecían en el complejo turístico y que habían sido realojados en otra vivienda por la propia empresaria.

En esta misma causa, otras tres personas fueron también detenidas. Finalmente Francisca Sánchez y un hombre de nacionalidad española quedaron en libertad con cargos. Los dos búlgaros comparecieron este sábado ante la Justicia, quedando finalmente en libertad con cargos.

Precisamente, la Guardia Civil informó este sábado sobre la detención de tres hombres – dos búlgaros y un español – y una mujer, presuntos autores de un delito de extorsión. El suceso tuvo lugar en la noche del pasado 15 de agosto en una vivienda situada en el camino de Porroig, propiedad de la empresaria Francisca Sánchez.

Según el Instituto armado, dos de los investigados accedieron al interior de la casa de manera violenta, rompiendo la puerta de entrada y profiriendo amenazas, además de exigir a los inquilinos que abandonasen la vivienda.

Las víctimas se refugiaron entonces en una habitación y avisaron a la Guardia Civil. Cuando llegaron los agentes, los asaltantes ya se habían marchado del lugar.

El pasado jueves estas personas pudieron ser detenidas, quedando dos de ellas en libertad con cargos, en concreto la empresaria y el joven español. Los dos búlgaros comparecieron este sábado ante la Justicia, quedando finalmente en libertad con cargos.

Se da la circunstancia de que los inquilinos, víctimas de estos extorsionadores, forman parte de uno de los grupos que residían en Casa Lola en el momento del desalojo, el pasado 9 de agosto. Ante lo sucedido y de manera temporal, la propietaria les ofreció otra vivienda para, de inmediato, comenzar a exigirles que se buscaran otro lugar.

Víctimas

La abogada de una de las personas que se alojaban en Casa Lola en el momento del desalojo aseguró este sábado que la denuncia por estafa contra la empresaria «va a ser un procedimiento más largo».

Frente a la magistrada del Juzgado de Instrucción número 2 de Ibiza, una de las víctimas ratificó este sábado su declaración por lo sucedido en la noche del 15 de agosto.

En declaraciones a Periódico de Ibiza y Formentera, esta persona – que prefirió preservar su identidad – aseguró que lo que pretende es recuperar su dinero, más de 300.000 euros según sus cálculos entre los tres grupos de inquilinos que se alojaban en el complejo turístico en el momento del desalojo.

A la estafa económica, hay que sumar el miedo que pasaron los turistas realojados en la otra vivienda debido al asalto: «Estas personas fueron enviadas por la propietaria. No quería que estuviéramos ahí».

Cuando comenzaron a recibir amenazas de Sánchez días antes de la extorsión, las víctimas optaron por contratar seguridad privada, lo que les supone también un importante gasto diario.

Esta persona relató además a este medio cómo el día antes del desalojo preguntaron a Paquita Marsan si iba a haber algún problema durante la estancia puesto que habían leído en prensa noticias sobre el proceso que iba a llevar a cabo el Ayuntamiento de Sant Josep. Según esta persona, la empresaria llegó a exigirle 40.000 euros el 8 de agosto, a pesar de saber lo que iba a suceder el día después.

El apunte

El proceso de derribo de las instalaciones sigue su curso

El Ayuntamiento de Sant Josep informó este sábado mediante una nota de prensa de los avances que siguen las obras de demolición de Casa Lola.

Hasta el momento se han derribado ya 1.300 metros cuadrados, lo que significa que, según el consistorio, «ya se tirado abajo completamente el edificio en L, del que se está acabando de retirar los escombros».

Por su parte, en el volumen principal de la infraestructura «se han hecho los escombros de los tabiques interiores de la planta baja y los forjados de la azotea, además de distintos anexos situados en el sur de la construcción». Así mismo, se ha hecho «el vaciado de todo lo que había en estas edificaciones y la retirada de otros elementos como ebanistería e instalaciones, además de los pavimentados».

Para el lunes se prepara la demolición de la zona baja de Casa Lolita una vez derribada la parte superior de la construcción.