Una red de pesca en el fondo del mar.

La recuperación de las redes perdidas en el mar es un aspecto que preocupa tanto al sector pesquero pitiuso como a las organizaciones ambientalistas. Es por ello que estos últimos meses se ha procedido a la creación de un protocolo por parte de la Comisión de Pesca de las Pitiusas que irá dirigido a profesionales del sector profesional y a centros de buceo que quieran colaborar en esta tarea.

El procedimiento involucra a técnicos de pesca, submarinistas profesionales y a la administración y contará con apoyo científico para evaluar en cada caso la mejor opción para proceder y optimizar los recursos destinados a las extracciones según los casos.

Margarida Serra, secretaria de este organismo, explicó que el primer paso es siempre recuperar las redes por parte de los propios pescadores, algo que aseguró que «siempre se hace si es posible, porque hay que tener en cuenta que una red es una herramienta de trabajo, no es algo que se deje allí porque se quiera sino que siempre es fruto de algún incidente».

En caso de que no sea posible, se centralizarán los avisos en la propia Comisión de Pesca para conocer el punto en el que se ha perdido esa red y en qué circunstancias para facilitar el poder realizar las extracciones.

Una segunda línea del protocolo irá dirigida a submarinistas. Ellos tendrán un sistema para dar la información de dónde han encontrado esa red.

En cada caso se fijará el mejor modo de extraer esa red para optimizar los recursos y hacerlo de una manera segura y eficaz.

A partir de octubre se dará a conocer dicho protocolo a las diferentes cofradías de Pitiusas así como para los centros de buceo y submarinistas que quieran conocerlo.

La pérdida de redes tiene un impacto a muchos niveles: medioambiental, al quedar en el mar una trampa para la fauna además de ser un residuo; visual, cuando queda expuesta; y un posible inconveniente para las embarcaciones en caso de que las hélices se queden enganchadas en ellas.

«Sabemos que la pesca genera un impacto y siempre intentamos trabajar para reducir estos impactos que generamos y el tema de las redes era un aspecto en que se tenía que mejorar», señaló Serra.

Impulso

Esta iniciativa ha sido posible gracias al apoyo de WWF que ha aportado un total de 10.000 euros (5.000 euros para cada cofradía) para la realización de dicha propuesta presentada por las cofradías de Formentera y Sant Antoni, enmarcada en un proyecto sobre formación sobre el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP) y el Fondo Europeo Marítimo Y de Pesca y Acuicultura (FEMPA).

Con esta acción se pretende reducir el impacto que el ejercicio de la pesca puede generar en el medio marino y contribuir a una mayor sostenibilidad ambiental.

Durante este período estival se ha procedido a extraer 17 piezas de redes cuya localización había sido recogida previamente por pescadores de las cofradías de Pitusas y en colaboración con el centro de buceo Formentera Divers.