Salvem sa Badia de Portmany, en coordinación con el Govern balear y la colaboración del Ayuntamiento de Sant Josep y Arenal Diving, ha creado un nuevo equipo de buceadores voluntarios con el objetivo de impulsar en Ibiza la Xarxa de Monitoratge de la Posidònia de les Illes Balears.

Esta red de monitorización de las praderas de posidonia para gestionar su conservación es una iniciativa de la Dirección General de Pesca y Medio Marino del Govern balear en 2002, con financiación europea y la colaboración del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEDEA). Tras cinco años paralizado, de 2012 a 2017, el proyecto se retomó gracias a los fondos del Impuesto de Turismo Sostenible.

El nuevo equipo de buceadores voluntarios ya ha comenzado a trabajar bajo la organización de Elisa Langley, bióloga de Salvem sa Badia, en coordinación con Tragsa. Uno de los primeros objetivos es la ampliación del número de estaciones de muestreo que integran la red, muy bajo en las Pitiüses, con solo dos estaciones en Ibiza y otras dos en Formentera, frente a las más de treinta de Menorca y las más de veinte de Mallorca.

El viernes se pusieron en marcha los trabajos de recuperación de la estación de es Vedrà.
Foto: Salvem sa Badia

El Ayuntamiento de Sant Josep se ha sumado a la iniciativa. Este mismo viernes, en colaboración con el centro de buceo Orcasub, y el apoyo de las Reservas Naturales des Vedrà, es Vedranell i els Illots de Ponent, se pusieron en marcha los trabajos de recuperación de la estación de es Vedrà, para lo que se contó con un equipo de cinco buceadores voluntarios.

Este domingo se pondrán en marcha dos nuevas estaciones de muestreo en Cala Gració, gracias a la colaboración del centro de buceo Arenal Diving, una labor en la que participarán ocho buceadores recreativos voluntarios. También se está trabajando para crear nuevas estaciones a lo largo de 2023.