En verano es difícil encontrar sitio libre en la arena, pues es una de las playas más concurridas de la isla.

La playa de Ses Salines es, indiscutiblemente, la playa más conocida y popular de Ibiza. Prácticamente todo el mundo que reside o ha estado de vacaciones en la isla ha visitado esta playa de arena fina y blanca y aguas turquesas.      Sus casi 1,5 kilómetros de longitud la convierten a su vez en una de las playas más extensas y su ubicación en la playa más al sur de toda la isla.

Se encuentra en el Parque Natural de Ses Salines, que se extiende desde el sur de Ibiza hasta el norte de Formentera y su entrada es una de las más bonitas. Para llegar a ella hay que seguir una estrecha carretera que pasa por en medio de las salinas y ofrece unas preciosas vistas de las mismas.

Hasta la llegada del turismo a la isla la explotación de las salinas fue la principal fuente de riqueza desde la época fenicia. Aunque hoy en día la producción de sal es algo residual en la economía de Ibiza, se sigue extrayendo con otras técnicas para su exportación a algunos países del norte de Europa.

Ses Salines es una playa ideal para todo el mundo. Su arena es blanca y fina que se extiende por todo el fondo, exceptuando algunas zonas rocosas. Por ello, es perfecta para practicar todo tipo de deporte acuático, como el snórkel.

«Es la opción cómoda cuando quiero playa pero no quiero ir muy lejos o caminar mucho», señaló David, un residente de la zona, a Periódico de Ibiza y Formentera.

Asimismo, la entrada al mar cuenta con muy poca pendiente y los visitantes deberá recorrer algunos metros hasta que el agua les cubra por completo. Esto la convierte en una fantástica opción para familias con niños ya que estos pueden nadar y disfrutar sin que el agua les cubra.

«Cuando mis hijos eran pequeños muchos domingos veníamos toda la familia a pasar el día entero y comer bajo las sabinas», explicó José, un andaluz que lleva afincado en Ibiza más de 60 años.

Como José había muchas familias que hace décadas aprovechaban la sombra de esta vegetación para pasar todo el día en esta magnífica playa. Actualmente esta zona está acordonada por la masificación de gente y para preservarla.

Al ser una playa muy popular, cuenta con todos los servicios necesarios: socorrista, parking, baños...

Además, encontraremos cuatro chiringuitos al que suelen acudir famosos de diferentes ámbitos: Beso Beach, Malibú, Jockey Club y Sa Trinxa.

Quizá si se busca tranquilidad ses Salines no es la mejor opción, especialmente en temporada alta, cuando es prácticamente imposible encontrar aparcamiento o bien un hueco en la arena.   

Pese a ser una de las más extensas de la isla, también es una de las más masificadas y colocar la toalla puede resultar una ardua tarea en julio y agosto. A esto se suma, además, la elevada presencia de vendedores ambulantes de todo tipo, que pueden llegar a perturbar el descanso de los bañistas que están tomando el sol. Además, por la tarde suelen pasearse empleados de diferentes discotecas de Ibiza promocionando sus fiestas.