Imagen de la parada de autobús instalada en la carretera de Santa Eulària.

Las obras de mejora de las carreteras EI-200 y EI-300, que unen el municipio de Ibiza y la localidad de Santa Eulària, y que ya han sido ejecutadas con una inversión de 2,2 millones de euros, incluyen seis nuevas paradas de autobús: dos a la altura de la tienda Cocoq, ya finalizadas y en funcionamiento, dos proyectadas en la reforma del cruce de ‘los Cazadores’ y dos más proyectadas en la zona de Cala Llonga, informaron ayer desde el Consell d’Eivissa.

En este sentido, el vicepresidente primero y conseller del departamento de Infraestructuras Viarias, Mariano Juan, explicó que con estas dos nuevas paradas se da respuesta a una reivindicación histórica de la Asociación de vecinos de es Burell, en Ca na Negreta, ya que además de instalar ambos puestos, se ha ampliado la plataforma para que se puedan apartar de la vía, lo que brinda una mayor seguridad a los usuarios.

Juan recordó que con estas obras se ha intervenido sobre 6 kilómetros de vía, donde se ha realizado una limpieza de márgenes de 2,5 metros de ancho, se han drenado las tuberías situadas bajo la carretera para evitar inundaciones, se ha añadido una nueva capa de asfalto, se han balizado los márgenes de la vía con bandas sonoras de seguridad, y se ha dotado a la zona con estas dos nuevas paradas de bus.

Por esta vía circulan a diario más de 20.000 vehículos, de los que 500 son pesados. «Era esencial convertirla en una vía preferente en la que desgraciadamente hacía más de 20 años que no se habían realizado trabajos de mantenimiento como los que hemos ejecutado en esta legislatura», declaró Juan.