Imagen de archivo de un taxi pirata interceptado en el municipio de Sant Antoni. | Archivo

La lucha con los taxis pirata sigue su curso esta temporada en biza. Las últimas cifras actualizadas de interceptación de taxis pirata por municipios pone de manifiesto que el Ayuntamiento de Sant Josep ha ‘cazado’ en lo que llevamos de verano a un total a 37 vehículos dedicados al transporte ilegal de pasajeros, según datos recopilados hasta el 20 de agosto.

En Santa Eulària, por su parte, en lo que va de año se han abierto cinco expedientes sancionadores contra conductores sorprendidos en el municipio realizando traslados irregulares de viajeros. Desde el Consistorio han informado este miércoles que las denuncias se han registrado entre julio y agosto, centrándose principalmente en los núcleos urbanos de Jesús y de Santa Eulària. En el municipio de Sant Antoni, hay 16 denuncias interpuestas contra taxis ‘pirata’ durante este 2022. Por el momento, no se dispone de datos actualizados de los municipios de Vila y Sant Joan. Desde el Consell d’Eivissa explicaron que proporcionarán datos sobre actuaciones del transporte ilegal a final de temporada.

Infracciones de los legales

Los expedientes y las consiguientes sanciones no solo son para los piratas sino también para los conductores legales por no cumplir la normativa de carga y descarga. En este sentido, dos taxistas de Ibiza se enfrentan a denuncias del Consell d’Eivissa por incumplir la orden de carga y descarga que aprobó recientemente el Govern y que entró en vigor el pasado mes de mayo. Los inspectores del Departamento de Transportes de la institución insular comprobaron cómo, en el aeropuerto de Ibiza, un profesional del sector se saltó la cola de los taxistas para recoger usuarios, mientras que otro conductor en Vila inició un servicio aplicando una tarifa incorrecta.

En relación a este último caso, los hechos se produjeron en la avenida Juan Carlos I de Ibiza. Los inspectores vieron cómo el taxista no quiso atender a unos turistas porque iban a un destisno «muy cercano». Sin embargo, poco después, el conductor se detuvo para recoger a otros clientes.

Además, al iniciar el servicio, este mismo taxista bajó la bandera y activó una tarifa incorrecta - la de llamada- a pesar de haber recogido a los viajeros en plena calle.

La otra infracción denunciada se registró en la zona del aeropuerto. Los agentes de Transportes del Consell d’Eivissa se dieron cuenta de que un taxi de Sant Josep no estaba respetando la cola de vehículos para cargar pasajeros. Cuando los inspectores le preguntaron por el motivo de este comportamiento, el taxista aseguró que tenía prioridad puesto que, según él, se encontraba en su municipio.

Desde el Consell le informaron después sobre la nueva normativa que contempla que, si hay clientes esperando en una parada, se debe respetar el orden de llegada del taxi, independientemente del municipio al que pertenezca.

Cuando el personal de Transportes le avisó sobre la posible sanción, el taxista, con conducta agresiva, reaccionó con muy malas maneras, entró en su coche dando una portazo y se marchó sin recoger a ninguna persona.

Tras dar a conocer ayer estas propuesta de sanción, el conseller de Transportes, Javier Torres, manifestó que la prioridad es la persecución de los taxis ‘pirata’, pero también actuar contra aquellos profesionales que actúan de manera incorrecta.

Según señaló, las «numerosas quejas de personas usuarias del taxi y de los propios profesionales del sector por el incorrecto funcionamiento de este servicio público nos han obligado a destinar parte de nuestros recursos de inspección a comprobar el cumplimiento de la ley de orden de carga y descarga. Desgraciadamente, estas actuaciones han concluido con denuncias a taxistas que no cumplían la normativa, rechazando trayectos y cobrando un precio superior a lo establecido. Como hemos explicado en reiteradas ocasiones, al igual que es esencial la coordinación entre las diferentes administraciones públicas, la policía y los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, también es imprescindible que el sector del taxi dé ejemplo y ofrezca su servicio con las máximas garantías».