En la cocina muchas veces cosas que parecen ilógicas, en realidad no lo son, como, por ejemplo: mezclar un calamar con sobrasada y miel, pero sin embargo está muy bueno, sobre todo si usamos una sobrasada de «porc negre», una raza de cerdo típico de aquí, que ahora se está rescatando.

El calamar es un cefalópodo, igual que el pulpo, y la sobrasada es un embutido que tiene pimentón, ¿le va bien el pimentón al pulpo?, yo creo que sí.

Hasta la próxima y buenos bocados.

INGREDIENTES para 2 personas

  • 2 calamar grande
  • 1 cebolla tierna
  • 100ml. de vino blanco
  • 2 cucharadas soperas de miel
  • 100 g de sobrasada
  • Aceite
  • Sal
  • Unas hojas de hierba buena

ELABORACIÓN

  • Para evitar que el calamar se encoja al cocinar, el fuego no debe estar muy alto.
  • Marcar con un cuchillo la superficie del calamar, para que quede un poquito más tierno, y poner a dorar sin aceite en una sartén.
  • Laminar la cebolla e incorporar a la sartén. Dar la vuelta al calamar y, cuando dore por ambos lados, retirar y dejar cocinando la cebolla, añadiendo un poco de aceite.
  • Trocear la sobrasada y añadir a la sartén junto con las patitas del calamar.
  • Dejar cocinar y cuando la sobrasada vaya soltando su grasa, añadir la miel y el vino blanco.
  • Reincorporar el calamar dorado, tapar y dejar cocinar hasta que reduzca el líquido.
  • En el fondo de un plato echamos la salsa de sobrasada, y encima ponemos el calamar y unas hojas de hierba buena.