El tradicional homenaje a los caídos con la entrega de una corona de laurel. | Daniel Espinosa

La Guardia Civil celebró ayer en el pueblo de Jesús el día de su patrona, la Virgen del Pilar. Un acto civil y religioso al que acudieron representantes de todas las instituciones públicas de la Isla y de algunas asociaciones civiles.

El comandante en jefe de la Guardia Civil en Ibiza y Formentera, Juan Carlos González, destacó en el acto institucional las «numerosas e importantes operaciones antidroga» que han permitido «mandar un claro mensaje a la delincuencia organizada sobre qué tipo de sociedad queremos». Una mención que tuvo su eco en los discursos del presidente del Consell d’Eivissa, Vicent Marí y el director insular, Enrique Sánchez, con la referencia directa a la importante operación que supuso este verano la incautación de la cantidad más importante de cocaína rosa en España.

La Guardia Civil celebra en Jesús el día de su patrona
Un momento de la celebración religiosa en Jesús

Celebración religiosa

La iglesia de Nuestra Señora de Jesús acogió a partir de mediodía la celebración religiosa en honor a la Virgen del Pilar. En la misa participó una nutrida representación del cuerpo, Protección Civil y representantes de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, además de representantes del Consell y de los ayuntamientos de la Isla.

Un momento de los discursos institucionales

La eucaristía estuvo presidida por el párroco, José Martínez. El obispo de las Pitiusas, Vicent Ribas, que presidió en Formentera la celebración de la Virgen del Pilar, en la Mola, envió sus felicitaciones. Martínez hizo un breve recordatorio de la historia de la Virgen del Pilar como patrona de la Guardia Civil desde 1913. En la homilía pidió por la protección de los agentes y les animó a cumplir con su vocación de servicio por el bien común.

Acto institucional

Tras la celebración religiosa se llevó a cabo el tradicional homenaje a los caídos con la entrega de una corona de laurel ante una cruz en el Centro Cultural de Jesús, escoltada por varios agentes. Con paso solemne avanzaron frente a la puerta del centro al son del himno La muerte no es el final.

Terminaron con un «viva España» que fue seguido por un espontáneo «viva la Guardia Civil» de una señora, al que la concurrencia respondió con un fuerte «viva».

En el acto institucional se hizo entrega de las condecoraciones a los agentes que han hecho mérito para recibirlas. En concreto: la Cruz de Plata a Alejandro Sendino Pérez de Santa Eulària, la Cruz de la Orden del Merito de la Guardia Civil con distintivo blanco a Ismael Cánovas Vacas de Santa Eulària y Verónica Romero Pérez de Sant Josep y una mención especial a David Atienza Sanz, a quien se entregó una placa y un diploma.

Importante labor

Juan Carlos González recordó a los agentes en su discurso el privilegio que supone servir en las Pitiusas, «marco incomparable de belleza natural». Después de una loa a los valores que representa la Guardia Civil dio «unas pinceladas» a los hitos del trabajo del cuerpo en las Pitiusas este año.

Además de las operaciones antidroga destacó la importancia de las labores en defensa del medio ambiente o las labores de salvamento y recepción de personas migrantes que «nuestro mundo privilegiado atrae y se embarcan en travesías peligrosas en busca de una vida mejor». Destacó la «alegría y alivio» que se percibe en muchos de sus rostros cuando contactan con una patrulla de la Guardia Civil y saben «que están en un mundo donde el «respeto y la dignidad de la persona están garantizados».

Por su parte, el presidente del Consell d’Eivissa, Vicent Marí, que intervino tras el primer teniente de alcalde de Santa Eulària, Miguel Tur, reconoció en nombre de todos los ibicencos la labor que realiza la Guardia Civil en la isla.

Un trabajo esencial «en un destino turístico mundialmente conocido», que requiere un esfuerzo importante por parte de las fuerzas de seguridad «que no siempre se reconoce como merecería».

Es, por ello, que reclamó «más medios y más efectivos para la isla». «En Ibiza tenemos que hacer frente a un inconveniente añadido: las dificultades que supone el traslado a la isla de los agentes por los problemas de vivienda. Por ello, nos toca a las instituciones seguir trabajando conjuntamente para dar solución a estos aspectos», por lo que ofreció su disposición y la de la institución que preside para colaborar en todas aquellas medidas que den solución a este problema.

El director insular en las Pitiusas, Enrique Sánchez, cerró el acto recordando los éxitos visibles, pero también los menos visibles como el trabajo con los más vulnerables, de las patrullas «buscando a una persona mayor perdida para que vuelva con su familia» o de protección a las mujeres víctimas de la violencia machista y sus hijos. Celebró, por ello, la cercanía de su labor.

Cerró su discurso con vivas a España, al Rey y a la Guardia Civil con todo el público en pie, antes de escuchar el himno de la Guardia Civil, que cerró el acto.