Imagen de archivo de la nueva depuradora de Portinatx. | Archivo

Los técnicos del Ayuntamiento de Sant Joan tienen previsto hacer entrega, en un plazo aproximado de una semana, del pliego de condiciones que regirá la licitación de las obras de la nueva depuradora de Portinatx. Así lo han manifestado fuentes consistoriales, que confían en que, cuanto antes, esté todo listo para que se puedan iniciar las obras de esta importante infraestructura para el norte de la isla de Ibiza.

Una infraestructura cuya tramitación se inició hace ya casi una década y que todo apunta a que más pronto que tarde será una realidad. En el año 2014 el Ayuntamiento de Sant Joan inició la tramitación ambiental para la autorización de la nueva EDAR de Portinatx. En marzo de 2015 remitió el proyecto de construcción, acompañado de un documento ambiental, a la Dirección General de Recursos Hídricos del Govern balear para que lo trasladara a la Comisión balear de Medio Ambiente e iniciar de esta forma la fase previa de consultas a las administraciones, de evaluación ambiental y posterior elaboración del documento de alcance del Estudio de Impacto Ambiental (EsIA).

En octubre de 2016, el Ayuntamiento remite a Recursos Hídricos el EsIA y solicita la continuación del procedimiento de evaluación de impacto ambiental. En agosto de 2018, sin haber recibido aún respuesta alguna, promueve, junto con el Consell d’Eivissa, la obtención de la subvención correspondiente a la convocatoria de ese año para la financiación del 50% de los costes de construcción de la depuradora con cargo al Impuesto de Turismo Sostenible.

En marzo de 2019, y tras haberse reunido en diversas ocasiones el Ayuntamiento con la Comisión de Medio Ambiente y con la Dirección General de Recursos Hídricos con objeto de desatascar el expediente, Recursos Hídricos remite el informe sobre la situación del proyecto, en el que justifica que no le corresponde actuar como órgano sustantivo, que el órgano con competencias para autorizar el proyecto es el propio Consistorio y que su participación en la tramitación ambiental es únicamente como administración afectada.

Sant Joan, ante este giro de los acontecimientos, solicita a la Comisión la aplicación de la tramitación de urgencia al procedimiento de evaluación de impacto ambiental ordinaria. Tras actualizar el EsIA redactado en 2016 a la nueva normativa ambiental vigente, el Ayuntamiento somete el el proyecto de la nueva depuradora y su estudio ambiental a información pública y a consultas a las administraciones públicas afectadas.

En octubre de 2019, tras recibir todos los informes pertinentes, el Ayuntamiento se reúne con la Conselleria de Medio Ambiente para consensuar las modificaciones a realizar en el proyecto para poder continuar con la tramitación ambiental.

El presupuesto inicial previsto para la tramitación y ejecución de la nueva depuradora de Portinatx superaba los 4,2 millones de euros. El proyecto prevé la demolición de la EDAR existente y la construcción de una depuradora sobre esos mismos terrenos. La instalación actual ocupa unos 1.500 metros cuadrados, a los que se incorporarán otros 2.000, con lo que la nueva EDAR abarcará una superficie de 3.500 m2. Las instalaciones estarán compuestas por un espacio administrativo y la zona industrial en la que estarán los dispositivos de tratamiento.

El sistema de tratamiento previsto en la nueva EDAR consistirá en un proceso biológico de aireación prolongada, uno de los más utilizados para poblaciones pequeñas por su fiabilidad y la necesidad de espacio reducido. Además se prevé la instalación de un equipo de desodorización por carbón activo que tratará el aire extraído de las salas de pretratamiento y deshidratación de lodos.

Dado que la EDAR se encuentra en zona ANEI, la Comisión de Medio Ambiente estableció que se compensara la eliminación del 100% de los árboles afectados por el proyecto mediante reforestaciones en terrenos degradados con una superficie total de, como mínimo, 2.000 m².

Por otra parte, en el plazo de dos años desde la puesta en marcha de la depuradora, se tendrá que reutilizar al menos una parte del agua depurada o presentar a la Comisión en el plazo de cuatro años un estudio sobre la viabilidad ambiental, técnica y económica de la reutilización de las aguas depuradas. En caso contrario, se tendrá que hacer una aportación al Fondo Posidonia de 10.000 euros.

La nueva estación depuradora de Portinatx ha centrado numerosos debates tanto en el propio Ayuntamiento de Sant Joan como en el Consell d’Eivissa y el Parlamento autonómico. De hecho, en 2019 el actual conseller de Infraestructuras Viarias, Mariano Juan, hizo hincapié en que la depuradora estaba obsoleta y todos los veranos provocaba una microalga que producía una coloración sospechosa del agua de esa playa. Juan preguntó también sobre la financiación de la nueva depuradora ya que, según recordó, se llegó a un acuerdo con el Govern para que financiara el 50% con el Impuesto de Turismo Sostenible y el otro 50% lo pagaría el Consell.