Imagen del centro de Sa Joveria, que se inaugurará el 14 de noviembre. | Arguiñe Escandón

A pocos días de la apertura del centro de baja exigencia provisional de Sa Jovería, tras dos años de retraso, un posible desacuerdo entre instituciones puede suponer un nuevo aplazamiento en la puesta en marcha de infraestructuras para las personas sin vivienda de la Isla.

El Consell d’Eivissa y el Ayuntamiento se reunirán en los próximos días para abordar el proyecto del centro de baja exigencia permanente en Es Gorg y el convenio entre ambas instituciones para su construcción, un texto firmado cuando en el Consell estaba todavía gobernado por el anterior ejecutivo de PSOE y Podemos. El acuerdo entre las instituciones era que el Consell financiaba la redacción y ejecución del proyecto, mientras que el Ayuntamiento se encargaba de la construcción en un terreno de su propiedad. Para ello se estableció un gasto de 5,5 millones de euros divididos en partidas plurianuales entre 2019 y 2022.

El convenio vence el próximo 31 de diciembre y existe desacuerdo respecto a qué hacer cuando llegue esta fecha. Mientras el Consell considera que se debe actualizar el convenio para la construcción de Es Gorg, para redefinir su contenido, el Ayuntamiento se acoge a las cláusulas del texto para solicitar su prórroga y poder poner en marcha cuanto antes las obras.

La consellera de Bienestar Social, Carolina Escandell, indicó que la prórroga del convenio no es tan sencilla según los servicios técnicos de la institución. «De momento la postura del Consell es la de renegociar un nuevo convenio. Las partidas económicas se tendrán que revisar de todos modos, porque los planteamientos de este convenio ya no son válidos», indicó la consellera.

Los retrasos en el proyecto, pandemia mediante, han llevado a que el Ayuntamiento no haya iniciado todavía la licitación de las obras de ejecución del proyecto.

«Todavía no hemos visto la documentación técnica ni los informes del proyecto, que veremos en esta próxima reunión. En cualquier caso nos tendremos que ajustar técnicamente. La voluntad, dado que sabemos que es una infraestructura muy necesaria, es llegar a un acuerdo, pero nos tenemos que sentar y tratar el tema», dijo Escandell al respecto.

Por parte del Ayuntamiento de Ibiza, indicaron que la prórroga del convenio se ha solicitado ya dos veces sin obtener respuesta, una formal por registro y otra a través de un correo electrónico personal a la consellera. Según explican fuentes del Consistorio, el convenio fija la posibilidad de su prórroga hasta tres años si las partes están de acuerdo.

Apuntan que la renegociación del convenio puede suponer retrasar más la construcción de una infraestructura muy importante para la Isla. La previsión del Ayuntamiento es poder poner en marcha las obras antes de verano de 2023 con un plazo previsto de ejecución de dos años.

Sa Joveria
El Consell considera que el centro provisional de baja exigencia de Sa Joveria no cubrirá todas sus plazas durante las primeras semanas. La institución se reunió la semana pasada con la empresa adjudicataria del servicio para tenerlo todo listo el próximo 14 de noviembre, día previsto para su apertura.

A lo largo de esta semana, la consellera Carolina Escandell indicó que se mantendrán reuniones con los ayuntamientos para abordar las derivaciones en las que se trabaja desde hace semanas.

«En un servicio tan nuevo como este habrá que hacer ajustes, pero lo importante es que esté habilitado antes de que llegue el mal tiempo», valoró Escandell. La previsión de usuarios no está cerrada, pero Escandell indicó que no se llenará al 100% dado que muchas personas sin hogar no quieren acudir a este tipo de centros, pero según empeore el tiempo volvió a recalcar que será importante tener este recurso habilitado para que lo use quien lo necesite.