El día en que Gertrudis ha cumplido su gran sueño

Unos actos que han disfrutado algo más de un centenar de personas de distintas edades pero, de entre todas, una por encima del resto, Gertrudis González Allende, una jubilada recién llegada desde Asturias con su marido Juan Antonio Aguirre García y que por fin ha podido ver cumplido su sueño de acudir al pueblo ibicenco en el que se honra a la santa que lleva su nombre.

Según ha explicado esta mañana la propia Gertrudis a Periódico de Ibiza y Formentera mientras no paraba de hacer fotos y grabar vídeos con su teléfono móvil, todo se remonta a cuando ella tenía 24 años, es decir, hace ya 43. «Fue un día en el que yo andaba limpiando unos azulejos en el restaurante donde trabajaba, cuando un hombre que resultó ser el cura de Tamón me preguntó cómo me llamaba y yo le dije que Gertru y que no tenía santo, a lo que él respondió que había un pueblo en Ibiza donde cada 16 de noviembre se hacía una gran fiesta».

El caso es que fueron pasando los años hasta que por fin este 2022 ha conseguido venir. «Siempre lo había tenido pendiente pero nunca habíamos podido por unas cosas y por otras hasta que ahora por fin, después de haber trabajado en Mallorca, Barcelona o incluso en el extranjero, nos hemos decidido aprovechando lo que hemos cobrado de la jubilación, y la verdad es que nos está sorprendiendo gratamente todo lo que estamos conociendo, no solo en este pueblo sino en lo que ya hemos visto de la isla».

Todo ello de mano de Juan Antonio, su fiel acompañante en esta vida desde que, tal y como ha confirmado él entre orelleta y orelleta, se conocieron cuando él tenía 18 años y ella 16. «Cuando nos conocimos en un baile ella me dijo que lo nuestro tal vez no llegaría nunca a buen puerto porque tenía un nombre que seguramente me sería muy difícil de recordar pero figúrate si ha funcionado que llevamos juntos y felices más de cincuenta años y hemos sido padres de una ‘guaja’ maravillosa de 44 años».

Misa, procesión y ball pagès

El resto del día grande de Santa Gertrudis también ha contado con la tradicional misa oficiada por el obispo de Ibiza y Formentera, Vicente Ribas, entre una gran expectación, la posterior procesión con las imágenes del templo y de la patrona de la localidad y el ball pagès.

En la marcha, por los alrededores de la iglesia, ha vuelto a llamar la atención la presencia del presidente del Consell d’Eivissa Vicent Marí y la alcaldesa de Santa Eulària, Carmen Ferrer, portando el estandarte al inicio de la comitiva, y la participación del grupo de niños compuesto por Dario, María Belén, Paula, y tres Joans, y que se han mostrado muy implicados y responsables portando la imagen del Jesús de Praga ante la atenta mirada de su orgullosa madre.

Finalmente, en el ball pagès, como suele ser habitual las grandes ovaciones se las han llevado los balladors y balladoras más jóvenes del Grup de balls tradicionals de Santa Gertrudis y una vez más, pequeños como Josean, Julia o Lucas, todos ellos de 4 años, han demostrado que los bailes tradicionales de Ibiza gozan de una magnífica salud y un mejor futuro.