Son las 14:00 horas en la estación de autobuses de Ibiza y las paradas de las líneas L3 y L13, que se dirigen a Sant Antoni y Santa Eulària respectivamente, se ven atestadas de personas que se dirigen a sus casas después de realizar su jornada laboral. La línea L13 de autobús llega a la hora, pero la larga cola que se había formado en la parada retrasa la salida. El motor del autobús de segunda mano espera ronroneando a que todos los pasajeros suban y se sienten en los viejos asientos pelados que tiene la vieja flota de autobuses de Sagalés. Así comienza el recorrido en autobús urbano de Periódico de Ibiza y Formentera por las algunas de las líneas más frecuentadas de la isla, pero también aquellas menos demandadas y concurridas.

Una red de autobuses urbanos que recorre prácticamente toda la isla gracias a la ampliación de frecuencias y trayectos en varias líneas de autobús. A los cinco minutos de coger la L13, los murmullos se calman y tan solo se escucha el ruido del motor que hace vibrar los asientos, especialmente los traseros. La flota de autobuses de largo recorrido tardará más en renovarse que las de corto recorrido.

Los primeros vehículos

Cabe recordar que Alsa incorporó este mes de febrero los seis primeros autobuses híbridos a las líneas más frecuentadas de Ibiza, con el objetivo de cambiar hasta 30 vehículos de la flota por autobuses híbridos y eléctricos. No obstante, muchos de los autobuses siguen siendo antiguos, de viejas flotas, y circulan por Ibiza generando ruido y contaminando el ambiente «De momento es lo que tenemos. Los autobuses de Sagalés tienen ya 18 años. Cuando la agrupación de empresas de transporte Sagalés formalizó la compra de la anterior compañía de transporte, también compró los vehículos», explicó el conductor Juan minutos antes de comenzar su ruta hacia Santa Eulària. En el lado opuesto está Vanessa, conductora de la Línea 14 de autobús de la empresa Alsa que conecta el municipio de Ibiza con Platja d’en Bossa.

Esta mujer señaló que están muy «contentos» con la renovación de los vehículos, puesto que los anteriores estaban muy viejos. «Han venido unos pocos, pero van a llegar más. El objetivo es renovar la mayor parte de la flota», explicó Vanessa haciendo hincapié en que estos autobuses dan más seguridad y comodidad a los viajeros. Explicó que la calidad del servicio aumenta y exclamó: «¡Mira! Ahora mismo está en marcha y no hace nada de ruido. A ver si hay suerte y los renuevan todos», apuntó esta conductora. En este sentido, al preguntarle por las reclamaciones y quejas de los viajeros cuando viajaban en los antiguos vehículos subrayó que estas protestas se centraban en los retrasos y en las averías que a veces sufrían los autobuses, obligándoles a coger otro bus o un taxi.
En este mismo autocar, en la última fila, estaba el viajero José.

Este hombre, que al vivir en Platja d’en Bossa coge casi todos los días la Línea 14, indicó que los viajeros han salido ganando mucho con el cambio. Además, corroboró las palabras de Vanessa al señalar que en más de una ocasión se quedó tirado a causa de una avería en uno de los autobuses viejos. «Un día nos dejó colgados y tuvimos que esperar media hora a que pasara el siguiente bus», lamentó este hombre que siempre se baja a la altura del Hotel Vibra Algarb, situado en Platja d’en Bossa. Por su parte, las viajeras Paula y Aroa también suelen coger esta misma línea y, aunque señalan que la frecuencia de media hora funciona, reconocen que los conductores no siempre son puntuales.

Unos retrasos ocasionales que confirmó el autobusero Juan, de la línea 13, mientras el viajero Miguel bajaba en una de las primeras paradas de esta ruta como es la de Can Misses. «Nos ajustan mucho los horarios y, a veces, llegamos tarde», apuntó Juan con el autocar colmado de viajeros. La misma demanda tienen los autobuses urbanos de la línea 10, que conecta Ibiza con el aeropuerto pasando por Sant Jordi, o la línea 3, dirección Sant Antoni. Mientras que la L10 cuenta con uno de los autobuses híbridos, en las rutas más largas continúan trabajando con vehículos antiguos. «Soy de Madrid y llevo una semana en la isla trabajando. Considero que para trayectos cortos viene muy bien estas incorporaciones nuevas», explicó Javi, conductor de la L10, mientras entregaba el billete a las viajeras Alejandra y Juliana.

Ambas están bastante satisfechas con el número de líneas y frecuencias de la red, pero también con el estado del servicio. Sin embargo, explicaron que cuando un autocar no puede llegar a su hora establecida ya no sigue operando en ese horario sino que se espera a la siguiente salida.
«Siempre cogemos este bus porque nos deja en Sant Jordi y vivimos allí. Al haber pocas paradas, enseguida estamos en casa», explicó Juliana. Todo lo contrario ocurre con aquellas líneas que hacen viajes largos a otros municipios de la isla. En este sentido, trayectos como la L3, L13, L25 o L30 se demoran en llegar al destino porque hacen muchas pausas.

Además, las diversas obras en la calzada en varios puntos de la isla perjudican el trazado de las líneas y, en muchos casos, los autobuses tienen que ir un poco más lentos por la carretera. «Los horarios están bien, pero se hacen demasiadas paradas», explicó una usuaria que se dirigía a Sant Antoni. En este sentido, mientras que la mayoría de viajeros encuestados señala que están contentos con la frecuencia de las líneas diurnas, no están igual de satisfechos con el número de rutas nocturnas. Es el caso de la viajera Nerea, una joven que se mueve por la isla en transporte público y que vive en Ses Païses, pero estudia en Sant Antoni. Explica que, a partir de las 18: 30 horas, la línea 3.1 (Can Bonet–Ses Paises–San Antoni  ) deja de operar y ella sale del centro por la noche.

Esto le obliga a coger otra ruta con más esperas. Además, tanto ella como otros usuarios reclaman la ampliación de las líneas con más rutas circulares por los municipios con más población. Solicitan lo mismo que hace la línea 45, que realiza un servicio más circular por toda la ciudad de Ibiza. También los viajeros se quejan de la variación de los horarios en algunas líneas como puede ser la L12B (Ibiza–Jesús–Puig d’en Valls) que, según la época del año, tiene unos horarios u otros.

El apunte

El presupuesto para transportes, el más elevado de su historia

El Consell d’Eivissa cuenta en 2023 con el presupuestopara transportes más elevado de su historia, puesto que duplica al del año pasado con más de nueve millones. Por este motivo, el conseller de Transportes, Javier Torres, señaló que este año se van a destinar «más recursos que nunca» al transporte público. En este sentido, el conseller explicó que el Plan de Transportes supondrá un antes y un después para Ibiza, tanto para las personas residentes como para las visitantes, con medidas para mejorar el servicio de autobús. Apuntó que estos cambios son fruto de todo el impulso del expediente de contratación del nuevo servicio de transporte, puesto que ya hay un proyecto aprobado definitivamente expuesto al público en el que se establecen las condiciones que tendrá que cumplir la flota. Aunque también reconoció que la situación sigue siendo muy compleja de gestionar porque «estamos muy limitados por la situación jurídica del contrato». No obstante, se mostró positivo e indicó que hay indicios favorables para pensar en la recuperación del servicio. También destacó que hoy, día 27 de febrero, arrancará la nueva línea L27, que conectará Sant Joan con Sant Miquel, Sant Mateu, Santa Agnès y Sant Antoni, y la variante L45B, que dará servicio a los pacientes del Centro de Salud de Vila.