Imagen de uno de los futuros hoteles nuevos de Sant Antoni. | Daniel Espinosa

Los hoteleros de Sant Antoni han invertido en lo que va de legislatura un total de 80,2 millones de euros en la reforma, ampliación y mejora de las instalaciones hoteleras del municipio. Unas cifras que, según han informado desde el departamento de Urbanismo del Ayuntamiento, corresponden a un total de 41 expedientes.

Y es que, como ya adelantó en 2019 el alcalde del municipio, Marcos Serra, su prioridad iba a ser el turismo y la mejora de la planta hotelera, algo que siempre ha considerado «esencial» para dar un giro radical al modelo turístico de Sant Antoni. «Para dar un salto de calidad turístico es necesario que los hoteles puedan hacer reformas, y en estos momentos no tenemos ya ningún hotel pendiente de que se le conceda licencia para realizar mejoras», ha explicado el primer edil, a excepción de algún caso concreto en que «se han hecho requerimientos y todavía estamos a la espera de que respondan».

Este afán por priorizar las licencias turísticas ha provocado que en el municipio de Sant Antoni estén en marcha en estos momentos dos proyectos de construcción de hoteles, uno de ellos de nueva factura y el otro la ampliación de un establecimiento ya existente. El primero de ellos se está ejecutando en la zona de la iglesia de Sant Antoni y cuya obra llevaba años paralizada por discrepancias del proyecto con el Plan Especial de la Iglesia. El otro es la ampliación de un hotel ya existente, el Recó des Sol, que ha conseguido licencia para aumentar sus instalaciones en la zona que actualmente está dedicada a aparcamiento frente al O Beach Ibiza. Con esta ampliación el Recó des Sol pasará a ser un hotel de cinco estrellas.

Y para poder fomentar este impulso a la renovación de la planta hotelera el Consistorio tuvo que proceder primero a la renovación del área de Urbanismo, que llevaba una legislatura prácticamente paralizada y que a día de hoy, según los datos de la delegación ibicenca del Colegio Oficial de Arquitectos de las Islas Baleares (COAIB), está dando las licencias de obra en suelo urbano en un plazo de 4,4 meses, y los finales de obra en un mes.

Esta efectividad de la Concejalía de Urbanismo ha provocado un auténtico boom de construcción de obra nueva en el municipio, especialmente en el interior del casco urbano, con un volumen de negocio que va más allá de los 40 millones de euros solamente contando la construcción de plurifamiliares. Estas obras van a dejar en las arcas municipales de la Villa de Portmany un total de 1,6 millones de euros en concepto de impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras.

Estas 25 licencias concedidas para la construcción de viviendas plurifamiliares se traducirán en 373 viviendas y 14 locales comerciales. En esta cifra no están contabilizadas las viviendas unifamiliares que se están ejecutando en zonas rústicas, especialmente en el área de Can Germà, donde se ha activado especialmente la construcción después de unos años de parálisis.

De las licencias que se están ejecutando en estos momentos en Sant Antoni, ocho corresponden a expedientes abiertos en el año 2018, otras ocho al año 2019, tres al año 2020, cuatro al 2021 y dos al 2022.

Desde el Ayuntamiento han insistido que, para poder dar este salto de calidad en el área de Urbanismo, además de reformarla y fortalecerla, ha habido que hacer mucho trabajo, entre otras cosas, para aprobar finalmente el Plan Especial de Protección de la iglesia de Sant Antoni, lo que ha permitido el desbloqueo de los trabajos de un nuevo hotel. También se han realizado un total de seis modificaciones puntuales del Plan General de Ordenación Urbana y en estos momentos se está trabajando para sacar adelante los planes especiales de protección de las iglesias de Sant Mateu y Santa Agnès.

Además de la transformación de la planta hotelera del municipio, el Ayuntamiento también está sentando las bases para que haya una mejora y una diversificación de la oferta complementaria, especialmente en la zona del West End, que históricamente siempre ha sido el punto más conflictivo del casco urbano. Para revertir esta situación, el Consistorio ha puesto en marcha una partida de 230.000 euros, procedentes de fondos europeos, para la creación de nuevos negocios y la reconversión de pubs y discotecas en comercios o restaurantes.El objetivo es que este entorno se convierta en más amable para los vecinos evitando que toda su oferta se centre en el ocio nocturno.

A esto también contribuirá el plan de embellecimiento del casco urbano de Sant Antoni, que continúa en marcha en la zona histórica de la localidad y que prevé, como colofón, exponer en el suelo de las principales calles del West End una obra de arte callejero de Okuda, un pintor, escultor y diseñador español especializado en arte urbano y de relevancia internacional. Suele realizar obras de gran formato con figuras fragmentadas en formas geométricas y fuerte policromía.