El PP cuestiona a Salewski por no aclarar quién se quedará el "sobreingreso" de la nueva contrata del agua

«Si con la subida de las tarifas se pagan los costes, las amortizaciones y el beneficio industrial del concesionario», ha preguntado Marí Bosó, «y le sobra dinero, ¿quién se lo queda?». Y ha añadido: «Si hay sobreingresos respecto de los gastos, baje las tarifas».

Marí Bosó también ha denunciado durante el debate que «los vecinos de Ibiza pagarán, como mínimo, un 5% en el recibo del agua» cuando se adjudique la nueva contrata. Una subida a la que deberán sumarse las que se produzcan a lo largo de las dos décadas de duración del contrato. «Todo esto son perjuicios a los ciudadanos por su negociación y su pufo del precio de la compra del agua a Abaqua», ha añadido, «ni más ni menos que 5,3 millones de euros y un supuesto de evolución irrealizable». En este sentido, el concejal del PP ha recordado que el gobierno del socialista Rafa Ruiz anunció que compraría «4,5 millones de metros cúbicos de agua por 2,4 millones de euros». Sin embargo, en el pliego de condiciones de la nueva contrata se prevé que este precio suba hasta los 5,3 millones de euros. Algo que Marí Bosó ha calificado como «el resultado de su nefasta gestión».

El portavoz del PP ha preguntado también a Salewski, sin obtener respuesta, si podía informar sobre la pretensión de Abaqua de incrementar el precio del agua «un 22% en 2024». «Usted no cuenta la verdad», ha añadido. En otro punto del debate, Marí Bosó ha señalado que el gobierno municipal no ha tenido una visión «general» de la gestión del agua pues, por ejemplo, el nuevo pliego de condiciones no contempla las actuaciones que deben llevarse a cabo según el Plan Sostenible del Agua, aprobado en 2021, o la relación de obras relacionadas con este área y que debían financiarse a través de los fondos europeos Next Generation.

Marí Bosó, finalmente, ha señalado que la presentación ante el pleno de este pliego de condiciones para su aprobación inicial no es más que «postureo del alcalde Ruiz» y ha subrayado que la crítica del PP no se dirige en ningún caso hacia los funcionarios que han participación en la elaboración del documento sino hacia Jordi Salewski, que es «el responsable político».

El concejal de Medio Ambiente, por su parte, ha defendido la subida de las tarifas señalando que esta será de tan solo «un 1% anual para las familias», lo que ha cuantificado en unos 2,5 euros al año. Jordi Salewski también ha afirmado que el gobierno municipal ha escogido la fórmula de gestión indirecta porque, de ser el Consistorio el que se hiciera responsable del suministro de agua, «la fuerte inversión inicial condicionaría los presupuestos municipales».

Salewski, además, ha recordado que el nuevo contrato obligará al concesionario a realizar 49 intervenciones en los primeros ocho años de la concesión y que, además, se destinarán 500.000 euros anuales para otras inversiones. A esto se deben sumar, ha recordado, la creación de un fondo social para ayudar a las familias más vulnerables y la contratación de una empresa externa para auditar el trabajo. El edil ha añadido que este nuevo contrato tendrá como objetivo modernizar el sistema del agua en la ciudad y ha asegurado que, en estos momentos, los residentes en Vila son los que pagan el suministro más barato.

El portavoz de Ciudadanos, José Luis Rodríguez, ha denunciado, por su parte, que el nuevo contrato no contempla intervenciones como la infiltración de las aguas pluviales en el subsuelo. Estas aguas, ha explicado Rodríguez, irán al tanque de tormentas y de ahí a la depuradora cuando su destino debería ser el de regenerar los acuíferos subterráneos. El concejal de Ciudadanos ha señalado que le parecen excesivos 20 años de contrato en un contexto de cambio climático y que, además, las inversiones previstas son bajas si se considera que Vila lleva «menos 14 años de inversión» pues la actual contrata caducó en 2010. En cuanto a las tarifas, Rodríguez ha señalado que «la subida penaliza a todo tipo de familias».