Madrid ha respondido así a una pregunta del portavoz del PSOE, Vicente Torres Benet, quien quería conocer qué medidas va a adoptar el Consistorio ante la posibilidad de que se produzcan situaciones de desabastecimiento. Algo que la concejal ha rechazado que vaya a suceder pues, según ha explicado, el hecho de que Recursos Hídricos haya alertado a los ayuntamientos «no quiere decir que vaya a producirse desabastecimiento». No obstante, la responsable municipal de Medio Ambiente ha explicado que, a lo largo de la actual legislatura, el Ayuntamiento ha activado diferentes iniciativas con el objetivo de fomentar el ahorro en el consumo de agua. Así, ha señalado que el Consistorio «ha municipalizado pozos haciendo una inversión importante». Además, se han «sectorizado» las tuberías para poder detectar las fugas lo antes posible y repararlas y se han implantado los contadores digitales. A esto ha sumado las inversiones en depósitos de agua desalada en zonas como la de can Furnet y implantación en los jardines municipales del riego localizado.
El pleno, por otro lado, ha dado luz verde a las ordenanzas reguladora y fiscal de los mercadillos instalados en suelos privados. Dos ordenanzas que afectarán a los establecimientos de Las Dalias y Punta Arabí, cuyos propietarios deberán abonar a partir de su entrada en vigor 30 euros mensuales por puesto y por cada día que se celebre el mercadillo. Esta tasa se aplicará entre los meses de mayo y octubre, según ha explicado el primer teniente de alcalde, Miguel Tur. El edil ha recordado que estos establecimientos suponen una serie de gastos para el municipio en áreas como seguridad, tráfico o recogida de basuras. Tur ha dejado claro que el Consistorio reconoce el importante papel que juegan tanto Las Dalias como Punta Arabí en la economía de Sant Carles, pero con estas nuevas tasas busca que los propietarios de ambos establecimientos sufraguen parte de los costes que tienen para el municipio. «Es una tasa para sufragar los costes que genera ese tráfico de 12.000 personas al día», ha señalado el edil. Tur, además, ha subrayado que estas nuevas ordenanzas dotarán al Consistorio de más seguridad jurídica. No ha aceptado, tal y como le ha solicitado el PSOE, el poder regular aspectos como el control de los artículos que se venden en estos espacios porque, ha dicho, este no es el papel del Ayuntamiento.
El momento más tenso del pleno lo ha protagonizado la concejal de Unidas Podemos Marta Maicas, quien ha presentado una moción con la que pretendía forzar al Ayuntamiento a enviar a los centros escolares del municipio las facturas de consumo de agua y luz. Una propuesta que la concejal de Educación, Marisol Ferrer, ha aceptado pero que quería vincular a que los colegios tuvieran proyectos que justificaran la recepción de esta información. Al final, se ha aprobado la propuesta incluyendo en la misma el reconocimiento a la gestión que ya está haciendo el Ayuntamiento en lo relativo al fomento de la sostenibilidad y la eficiencia energética en estos centros escolares. Así, se ha dado luz verde a la instrucción de que el Ayuntamiento tendrá que seguir ejecutando auditorías en los colegios del municipio y, a partir de sus resultados, ofrecer recomendaciones a los centros para mejorar su gestión de la energía y del agua con la participación tanto de los responsables de los mismos como de los alumnos.
En este último pleno de la legislatura se ha dado también luz verde a la adhesión del Ayuntamiento al Pacto de Alcaldes y Alcaldesas por el Clima y la Energía y a la Red Española de Ciudades por el Clima. Además, se ha aprobado una ampliación de crédito para poder ayudar a familias con hijos con necesidades educativas especiales para que participen en las escuelas de verano y Navidad. Servicios que, en principio, prestará Amadiba.
Durante el pleno, la segunda teniente de alcalde, Antonia Picó, ha explicado que el retraso en la autorización de las instalaciones de playa en el municipio ha obedecido al cambio de criterios fijado por la Conselleria de Ordenación del Territorio del Govern balear. Un cambio de criterios que, según ha explicado, no se dio a conocer con tiempo suficiente y que ha afectado a todos los ayuntamientos de la isla y a Formentera. En el caso de Santa Eulària, según ha señalado, queda algo más de un 10% de instalaciones por autorizar por parte de Ordenación del Territorio y la documentación para este trámite se ha remitido al departamento este mismo jueves.
A preguntas del PSOE, Picó también ha dado a conocer las nuevas paradas de taxi autorizadas por el Ayuntamientos. Paradas que se han ubicado junto al instituto Xarc, el hotel W, la calle San Lorenzo, el Palacio de Congresos y la carretera de s’Argamassa. Además, se ha dotado de más espacio a otras como la de es Canar.
Al finalizar el pleno, la alcaldesa, Carmen Ferrer, ha tenido palabras de agradecimiento para todos los concejales, tanto los de su gobierno como los de la oposición, y los trabajadores municipales. Ferrer ha recordado que la legislatura ha sido "difícil" por la irrupción de la pandemia de COVID-19 pero ha destacado cómo entre todos pudieron afrontar aquel momento. "Cada uno en su ámbito", ha recordado a modo de conclusión, "lo ha hecho lo mejor posible. Si Santa Eulària es hoy un municipio de referencia ha sido por el trabajo de todos".
4 comentarios
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El pajaritoEste comentario es de lo más inteligente y realista de los que últimamente leo por diferentes sitios donde hay opiniones,me extraña que ninguna fuerza política "progresista" haya "sugerido " alguna propuesta para "esa gente"que da tambuena "imagen" al municipio .
Fantástica idea lo de cortar el agua en las playas. Da una pena ver a niños, y no tan niños, darle al pulsador y tirar litros y litros para lavarse los pies! Y si no, que las pongan de pago, 0,50 1 minuto, veríais como no derrochaban tanta.
Pues ya veo a los dueños de los mercadillos subiéndoles 30€ más al día el puesto a los vendedores porque no me creo yo que lo quieran asumir. El caos los días de mercadillo tanto en uno como en el otro es terrible…
En Vila no lo podemos hacer porque dejaríamos a muchísimos indigentes sin agua para lavarse